Sucre: Huérfanas de Chataquila vivirán en Aldeas Infantiles SOS
No fueron bien tratadas en la casa de una prima, donde vivieron inicialmente
Además de haber sufrido la tragedia más grande de sus cortas vidas: la pérdida de ambos padres en cuestión de un par de meses, las cuatro huérfanas del fatal accidente de Chataquila tuvieron que pasar otro drama para encontrar un lugar donde poder vivir juntas. Casi un mes después del accidente que se cobró la vida de 34 personas, las cuatro huérfanas ya tienen el visto bueno para ser acogidas en las Aldeas Infantiles SOS de la ciudad de Sucre.
El accidente más cruento registrado en la historia de las rutas del departamento, aquel 12 de julio, se cobró la vida de Domingo Flores (55 años), el único progenitor que les quedaba a las cuatro hermanas, quienes apenas se recuperaban de la muerte de su madre, dos meses antes, aquejada por un cáncer.
La tragedia que conmovió al país y despertó la solidaridad de autoridades locales, desnudó la cruda realidad socioeconómica que agobia a cientos de habitantes en las regiones de Potolo en Chuquisaca y Tomoyo, en Potosí, que no solo comparten una misma ruta hacia Sucre, sino también carreteras en mal estado y servicios de transporte con escasos controles.
La secretaria municipal de Desarrollo Humano y Social, Teresa Flores, relató ayer a Correodel Sur Radio FM 90.1 la epopeya que tuvieron que pasar las cuatro huérfanas, quienes inicialmente se fueron a vivir con una prima paterna, previa firma de un acta de compromiso y responsabilidad. Sin embargo, tras una evaluación realizada por personal de la Defensoría de la Niñez correspondiente a los distritos 6, 7 y 8 del municipio de Sucre, se conoció que las niñas no estaban recibiendo un buen trato por parte de una tía y, peor aún, que la familia pensaba enviar a la hermana mayor a otra casa.
Ante ello, funcionarios municipales presentaron una solicitud de acogimiento circunstancial ante el Juzgado de la Niñez, el cual la aceptó y derivó a las menores de edad a la Aldeas Infantiles SOS, entidad que de inmediato no pudo recibirlas porque tenía dificultades logísticas por falta de personal, según relató Flores.
Subsanado aquello, se presentó otro imponderable: que las niñas arrojaron un resultado positivo a covid-19, lo cual frenó su acogimiento. La Alcaldía, que colabora en la búsqueda de un hogar, tuvo que gestionar nuevas pruebas complementarias (nasofaríngea y PCR), las cuales finalmente salieron negativas.
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