Rifa de una casa donada en Sucre se suspendería
La finalidad del sorteo era recaudar dinero para la compra de una planta de oxígeno
La rifa de la casa, cuya recaudación se iba a destinar a la compra de una planta de oxígeno en Sucre se suspendería debido, aparentemente, a la revelación que se hizo en el sentido de que el bien inmueble estaba hipotecado.
Consultado ayer por periodistas, el promotor de esta actividad, Ariel Gonzáles, no adelantó si el sorteo se iba a suspender o no. Dijo que al respecto emitirá con comunicado oficial en las siguientes horas.
Sin embargo, CORREO DEL SUR conoció de fuente confiable que la rifa de la casa definitivamente no va más, que en el transcurso de los últimos días ya se hizo la devolución del dinero de los números que se habían vendido y que solo faltaba por completar 500.
LA DONACIÓN
En agosto pasado, el empresario Gonzáles anunció que donaba una casa de su propiedad ubicada en la calle Destacamento Chuquisaca, construida en una superficie de 157 metros cuadrados y valuada en más de 160 mil dólares. En ese entonces se dijo que la finalidad era recaudar dinero para comprar una planta de oxígeno. Gonzáles explicó que hacía la donación de una casa como muestra de agradecimiento a Dios porque le había salvado la vida.
Para llevar a cabo la venta de rifas se habilitaron nueve puntos en Sucre, pero además se logró establecer contacto con instituciones y organizaciones que habrían comprometido su adquisición. Toda la logística estaba cargo de Gonzáles y su equipo.
HIPOTECAS
Sin embargo, cuando ya se entraba a la recta final para la realización de la rifa, se reveló que la casa tenía cuatro anotaciones preventivas de hipotecas, de las que su propietario aclaró que solo una, por 350 mil bolivianos, estaba vigente.
Al enterarse de esta noticia, el alcalde Enrique Leaño fue el primero en afirmar que las rifas que habían sido entregadas a esa institución iban a ser devueltas.
Gonzáles aclaró que ya había llegado a un acuerdo para el desgraven de la hipoteca y que antes del sorteo la casa iba a estar libre de anotaciones; empero, aun así esto generó una total incertidumbre en la población, por lo que, al final, se devolvieron casi todos los números vendidos.
SIN AUTORIZACIÓN
Cuando parecía que solo las hipotecas de la casa ponían en duda la seriedad de la rifa, la Autoridad de Fiscalización del Juego (AJ) emitió un comunicado en el que se hacía constar que no se había dado ninguna autorización para la actividad en cuestión.