Chuquisaca ocupa segundo lugar en desnutrición crónica infantil
La desnutrición crónica en niños y niñas de 6 meses a 5 años de edad llega al 26,2% en Chuquisaca, lo que sitúa al departamento como el segundo con mayor porcentaje, después de Potosí, a nivel nacional.
La desnutrición crónica en niños y niñas de 6 meses a 5 años de edad llega al 26,2% en Chuquisaca, lo que sitúa al departamento como el segundo con mayor porcentaje, después de Potosí, a nivel nacional.
El diagnóstico situacional sobre la Alimentación Complementaria Escolar, la Educación Alimentaria Nutricional y la producción local desarrollado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y Alcaldía de Sucre arroja resultados preocupantes para el departamento.
La desnutrición en la niñez, particularmente la crónica que se relaciona con la baja talla para la edad, afecta de manera negativa a la posibilidad de que el niño o la niña alcance su potencial de crecimiento y desarrollo, destaca el informe.
A nivel nacional, el departamento con mayor desnutrición crónica es Potosí con un 29,8%, seguido de Chuquisaca y Oruro, que tienen porcentajes más altos frente a Santa Cruz, Tarija y Beni.
El 26,2% que detenta Chuquisaca significa que aproximadamente cerca de tres de cada diez niños en este rango de edad presentan este problema.
Todo ser humano tiene derecho a la alimentación con dignidad, esto conlleva a tener acceso continuo a los recursos que permitan producir, ganar o comprar suficientes alimentos, y no solo para prevenir el hambre sino también para asegurar la salud y el bienestar, advierte la FAO.
CIFRAS GLOBALES
A pesar de ello, el hambre y la desnutrición siguen siendo grandes impedimentos para el desarrollo de muchas naciones. Se estima que 821 millones de personas sufren de desnutrición crónica en todo el mundo, a menudo como consecuencia directa de la degradación ambiental, la sequía y la pérdida de biodiversidad.
Más de 90 millones de niños menores de cinco años tienen un peso peligrosamente bajo. De acuerdo al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la desnutrición y la inseguridad alimentaria se fueron incrementando en casi todas las regiones de África, así como en América del Sur, agravándose durante los dos últimos años.
Este panorama también se visualiza a nivel mundial, donde el 45% de las muertes de menores de 5 años están relacionadas a la pérdida de nutrientes, en su mayoría, en países de bajos y medios ingresos económicos.
La FAO señala que al menos 3.000 millones de personas no pueden permitirse dietas saludables.