¿En qué estado se encuentra la plazuela Tarija, en Sucre?
Unos cuestionan su estética; para otros, no requiere de refacciones significativas
En pleno de centro de Sucre, a pocas cuadras de la Plaza 25 de Mayo, personas que transitan por las calles Aniceto Arce, Lima Pampa y José Ballivián, circundantes de la plazuela Tarija, lamentan el mal aspecto que dan los ornamentos y jardineras.
No solo eso. Algunos creen que, en general, el trabajo de mantenimiento de estos espacios públicos en Sucre no es óptimo, por lo que plantean reestructurar la planificación que tiene el Gobierno Autónomo Municipal de Sucre (GAMS) en relación con las refacciones de las áreas verdes.
EL CASO DE LA PLAZUELA
En el caso concreto de la Plazuela Tarija, vecinos de esa zona observan que esta no se encuentra en un estado óptimo y que, con el pasar del tiempo, las autoridades han dejado de velar por su mantenimiento.
La última vez que se hizo una refacción importante de este lugar fue hace varios años, cuando la plazuela fue rediseñada por completo. No obstante, la queja apunta a que el rediseño no es el adecuado y que, por el contrario, rompe con la estética del centro de la ciudad. Por otra parte, no cuenta con suficientes bancas, lo cual para algunos es inaceptable considerando que se trata de una zona muy transitada.
POSIBLES SOLUCIONES
Es bien sabido que la Plazuela Tarija, al igual que la de El Reloj, son puntos clave en donde se reúnen albañiles y obreros de otras ramas con la finalidad de conseguir un empleo temporal en trabajos domésticos.
Residentes del área consideran que, si bien ellos tienen todo el derecho de permanecer en el lugar, su presencia no contribuye al aspecto antes mencionado, pero, ante su necesidad, una de las vecinas propone que el GAMS emplee a estos trabajadores temporales para las refacciones de las oficinas públicas o en lo que se crea conveniente.
LOS RESIDENTES
CORREO DEL SUR se dirigió a inmediaciones de la Plazuela Tarija con el fin de recabar la posición de los vecinos y allí constató que las opiniones están divididas.
Por un lado hay gente que pide mejoras, porque está disconforme con estado de este espacio público, y por el otro también se escuchan voces en sentido de que no ven ninguna urgencia en este sector de la ciudad. En este último grupo se encuentran quienes dicen que hace algunos años la plazuela era uno foco de delincuencia, de consumo de bebidas alcohólicas e incluso de venta de sustancias ilícitas. De hecho, varios entrevistados revelaron que la junta vecinal de ese entonces solicitó el retirado de las bancas para evitar que estas personas se reuniesen allí. Frente a esa solicitud se procedió con los arreglos de la plazuela, sin bancas y con mayor iluminación.
LOS TRABAJADORES
Este medio también conversó con las personas que se asientan en el lugar a la espera de un trabajo temporal. Ellos consideran necesario que se coloquen bancas para utilizarlas mientras esperan que los contraten.
Creen que el colocado de banquetas no supondría un aumento en la inseguridad, puesto que el último rediseño de la plazuela permite que todo el espacio esté correctamente iluminado.
Revelan también que les resulta difícil e incómodo posarse en las jardineras debido a que, en ocasiones, algunas personas llevan ahí a sus mascotas y ellos deben mantenerse parados o sentarse en la calzada.
LOS VECINOS
“La plazuela está totalmente descuidada y seca. De pronto pusieron unos fierros que no van acorde a la estética”.
Graciela Olivares
“Es una lucha entre la seguridad y la estética de la plazuela y, la verdad, preferimos estar seguros”.
Anónimo
“Necesitamos que haya asientos. No puede ser que en pleno centro no haya bancas para sentarse”.
Rusmilda Arancibia