La distrofia muscular deja impedidos a 3 hermanos

Una familia proveniente de Yamparáez rema en contra de la distrofia muscular de Beker –una enfermedad sin tratamiento conocido–, que con el pasar del tiempo dejó a tres de los varones sin movilidad en las piernas y el año pasado arrastró y mantiene a uno de ellos en terapia intensiva del hospital.

La situación de la familia Almendras-Coronado se complicó hace cuatro meses, cuando René –el único de los hermanos que contaba con una fuente laboral segura y era el sustento del hogar– fue hospitalizado debido a problemas relacionados a la distrofia.

Desde entonces, los problemas económicos de la familia se ahondaron, las cuentas del hospital crecieron y les significaron hasta 500 bolivianos diarios; esto mermó sus limitados ahorros y al cabo de todo este tiempo, ya sin fondos para pagar el alquiler o alimentarse, piden ayuda.

La familia la componen nueve personas, ocho hijos y una madre de la tercera edad. “No hemos pasado una Feliz Navidad porque tener un hermano en terapia intensiva es complicado”, le dice a CORREO DEL SUR Remberto Almendras al resaltar que René era el sustento de la familia.

“Lo que estamos necesitando es pulmón artificial, aspiradora, colchón antiescaras una vez que salga mi hermano del hospital) para que lo tengamos aquí, en casa”, pide Sergio, otro de los hermanos afectados con el mal. 

“Necesitamos esas máquinas para que él pueda estar en la casa, porque en el hospital después de terapia intensiva lo van a poner en la otra sala y de ahí tenemos que sacárnoslo”, afirma con certera esperanza Remberto, aunque señala que en este tiempo el cuadro de René no presentó mejorías.

Desde los 8 años

La enfermedad que afecta mayormente a los varones y empeora lentamente se presentó en los hermanos Almendras a temprana edad. Sergio comenta que ya a los ocho años sufrían extrañas caídas que fueron cada vez más frecuentes.

Con el paso de los años, empezaron a perder la fuerza en los músculos, brazos y piernas, tanto que ahora requieren de una silla de ruedas para movilizarse. Pese al mar de vicisitudes trabajan en lo que pueden, buscan superarse a diario y sueñan con una fuente laboral.

“Si es posible alguna empresa o algo, una fuente laboral, yo hago diseño gráfico, hago mantenimiento de computadoras si alguien nos puede dar una fuente laboral sería de gran ayuda”, refiere Remberto. Su número de contacto es el 74686068.

La madre de 60 años de edad lamenta que sus hijos afectados por esta enfermedad sufran muchas necesidades y se siente impotente al no poder ayudarles debido a que dedica gran parte del día a su cuidado personal.

Los hermanos tienen entre 28, 32 y 38 años de edad, perdieron la movilidad en las piernas y ahora la distrofia muscular de Beker –que es una enfermedad hereditaria que causa debilidad progresiva y atrofia de los músculos esqueléticos y del corazón– amenaza a sus miembros superiores. Viven en Sucre en un cuarto en alquiler ubicado cerca al mundito.

AYUDA  

Los aportes económicos pueden realizarse al número de cuenta: 10000024428696 del Banco Unión a nombre de Sergio Almendras Coronado; cualquier otro aporte es bienvenido en la calle Guayana Nro. 6 o llamando a los números 63752423 y 74686068.

La solidaridad no se hace esperar

Después de conocer el caso de la familia Almendras en redes sociales, varias personas se contactaron para ayudar de diferentes formas, inclusive transportando a la familia para recoger los aportes, uno de los más grandes llegó ayer, al final de la tarde cuando la señora Carmen Antequera entregó un generador de oxígeno.

“Este aparato lo había comprado para mi hijo en la época de covid, estaba muy delicado. Gracias a Dios mi hijo se ha recuperado, está muy bien sin secuelas y a nombre de él se lo doy”, dijo al llamar a otras personas a solidarizarse con la familia.