Zona San Roque: Vecinos buscan el arreglo de una calle de tierra
El Subalcalde del D-1 confirmó a este diario que colaborará con los trámites necesarios y dará soluciones
Detrás de la cárcel San Roque se extiende una ruta de tierra que, para los vecinos, es comprendida como la extensión de la calle Trinidad. La vía en cuestión trae problemas a quienes habitan la zona debido a la polvadera que generan los vehículos que transitan por el lugar y el fango que se produce en temporadas de lluvia.
Se trata de una calle por la que la junta vecinal del barrio San Roque ha intercedido en múltiples ocasiones a distintas instancias municipales para pedir pavimentación o enlosetado.
Sin embargo, luego de años de insistencia, no recibieron las respuestas que esperaban y se derivó su reclamo a las oficinas de Patrimonio Histórico. Esto, de acuerdo a los vecinos, empeoró la situación.
Además de la circulación vial constante, polvareda y barro, exigen la construcción de un muro de contención para evitar el desplazamiento de tierra hacia las viviendas que se encuentran debajo de esta calle.
Los residentes de la zona confesaron a este medio de comunicación que se afligen ante la posibilidad de un accidente por allí: temen que un vehículo pueda perder el control e ingresar abruptamente a uno de los domicilios y que, solo ante una situación límite como esa, recién se pudieran ejecutar las obras reclamadas.
Cientos de vehículos transitan por el lugar todos los días, ya que esa calle es una vía de escape de la ciudad. Esta, en particular, es conectora entre la calle final Bolívar con el barrio América, la zona del teatro Mauro Núñez, y se constituye como un atajo para llegar al barrio Petrolero sin pasar por el casco histórico.
Derecho propietario
Esta calle, al igual que otras de la ciudad, tiene problemas con el derecho propietario. Los vecinos reclaman por mejoras que no pueden realizarse debido a que no figura como propiedad de la Alcaldía.
Esto llevó a que se genere una gran cantidad de trámites y negativas de parte de instancias municipales. Por ejemplo, los habitantes del lugar relatan que años atrás pidieron mover los postes de alumbrado público, que se encontraban en las propiedades de los vecinos, a la calle de tierra. Ante esto, Patrimonio Histórico argumentó que la calle pertenecería a ese despacho, por lo que los postes volvieron a estar dentro de la casa de los vecinos.
Pese a esto, la junta vecinal y otros residentes continuaron con los papeleos y trámites para habilitar correctamente la vía. “Se tiran la pelota entre ellos y perjudican a los vecinos”, dijo, molesto, uno de ellos.
¿POR QUÉ NO SE PUEDE?
Todos los terrenos que se encuentran en la zona pertenecieron en algún momento a Josefina Barrientos, una mujer a la que los vecinos intentaron ubicar para que pueda ceder la calle a la Municipalidad.
Sin embargo, luego de años de búsqueda, no pudieron encontrarla ni tampoco contactar a familiares cercanos.
Tras mucho tiempo de intentar conseguir soluciones, uno de los vecinos optó, desde hace más de 10 años, llevar a cabo un proceso de usucapión, prescripción de los terrenos a su nombre. Esto debido a que, de acuerdo a la distribución del territorio en documentos municipales del año 1977, la calle se habría inscrito con el número de terreno correspondiente al vecino.
Esta persona comentó a CORREO DEL SUR que la intención del proceso de usucapión es ceder la calle a predios municipales para que así se puedan ejecutar las obras correspondientes y mejorar la vía en pro del tránsito vehicular y de los vecinos de la zona.
Tanto él como el resto del barrio esperan que ese trámite pueda concluir luego de años intentando diferentes medidas.
¿QUÉ DICE LA ALCALDÍA?
Este diario se puso en contacto con el subalcalde del Distrito 1, Renato Enríquez. Sorprendentemente, la autoridad informó que, de acuerdo a su conocimiento, la calle en cuestión pertenecería a la cárcel San Roque.
Posteriormente, se comprometió a solicitar un informe a Patrimonio Histórico para verificar la situación de esta calle y colaborar con el tratamiento necesario para dar solución al problema.
“El problema de esa calle es que no está clara la figura jurídica para poder intervenir; entonces, estamos pidiendo a Patrimonio un folder para que tengamos con certeza la información”, dijo Enríquez.
¿Que opina?
“La pobre gente que vive acá abajo tiene que convivir con el polvo constantemente”.
Freddy Michel
“Con tanto polvo y barro, así, no podemos vivir, es un riesgo la calle”.
Candelaria
“Todo el tiempo nos han ofrecido obras y nada de hacerse efectivas para solucionar los problemas”.
Lucy Vargas
“Mi mamá luchó por la calle. Ahora yo lucho por que se haga algo y, parece que mis hijos van a tener que seguir con eso”.
Américo León