Rinden homenaje póstumo a Juana Azurduy en Sucre
En un acto emotivo en la Casa de la Libertad, la Gobernación de Chuquisaca y la Alcaldía de Sucre realizaron este jueves el homenaje póstumo a Juana Azurduy de Padilla con la presencia de autoridades ediles e invitados, en el que se destacó la figura histórica de la heroína guerrillera.

En un acto emotivo en la Casa de la Libertad, la Gobernación de Chuquisaca y la Alcaldía de Sucre realizaron este jueves el homenaje póstumo a Juana Azurduy de Padilla con la presencia de autoridades ediles e invitados, en el que se destacó la figura histórica de la heroína guerrillera.
La directora del Centro Juana Azurduy, Martha Noya, destacó el aporte a la historia boliviana de la heroína. Participaron también concejales del municipio, autoridades policiales e invitados de Argentina y otros departamentos del que acompañaron los restos de la guerrillera durante el sentido homenaje.
“Es muy emotivo (el acto), nos hace sentir a las mujeres que nuestra heroína Juana Azurduy de Padilla ha sido mujer ejemplar, guerrera y no hay que dejarse vencer. Las mujeres (deben estar) siempre arriba como ella”, manifestó la concejal, Carmen Rosa Durán, de República 2025.
Por su parte, la directora de Gabinete de la Gobernación de Chuquisaca, Yesenia Yarhui, al rendir su homenaje a Azurduy, resaltó el papel de las mujeres en la actualidad y las exhortó a que sigan trabajando para hacer historia en Bolivia y asumir roles protagónicos hacia un cambio generacional.
El pasado martes, al cumplirse 161 años del fallecimiento de la heroína (25 de Mayo de 1862), horas previas a esta celebración, el grupo Ateneo Cultural “Juana por Siempre” recomendó a las autoridades municipales y departamentales institucionalizar cada 25 de Mayo un homenaje religioso en honor de la guerrillera de Sudamérica.
Para el historiador y catedrático Guillermo Calvo, el homenaje debe incluir una celebración eucarística en la parroquia de San Sebastián, donde hace 161 años se realizaron las exequias fúnebres y la misa de cuerpo presente de Juana Azurduy.
El primer acto de veneración fue en dicha parroquia, con una misa de réquiem “in memoriam” de la guerrillera, quien falleció en su alcoba de la Calle de los Bancos, frente al tambo de Qoripata, (hoy España), el 25 de mayo de 1862, a los 81 años 10 meses y 13 días.