Los estragos del tabaco
La epidemia silenciosa que cobra cada año la vida de 8 millones de personas en el mundo
El tabaquismo, en constante crecimiento en las últimas décadas, ha alcanzado proporciones epidémicas, cobrando la vida de más de 8 millones de personas cada año, sin tener en cuenta las víctimas de su consumo indirecto. Aunque la forma más común de consumir tabaco es a través del cigarrillo, otras modalidades como el narguile y la pipa de agua, consideradas por algunos menos riesgosas, han demostrado ser igualmente perjudiciales, según estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
NIÑOS ENTRE 13 Y 15 FUMAN
El impacto devastador del tabaquismo no se limita a la población adulta; en 2021, alrededor de 43 millones de niños y jóvenes entre 13 y 15 años eran consumidores en todo el mundo. Además de esta alarmante cifra, aproximadamente el 10% de los niños se encuentran expuestos al humo diariamente, lo que puede tener graves consecuencias para su salud. Este constante contacto con el humo del tabaco ha sido vinculado a enfermedades como crisis asmáticas, infecciones respiratorias, otitis y otras afecciones, representando un riesgo considerable para los infantes.
ASIA CONSUMIDOR Y PRODUCTOR
Asia emerge como el continente con la mayor concentración de consumidores de tabaco, alcanzando alrededor del 45% de la población. A pesar de esta cifra preocupante, existe una tendencia a la baja, con la expectativa de reducirse a un 25% para el año 2025. Un factor crucial que influye en esta tendencia es la posición de China como el principal productor y consumidor de tabaco a nivel mundial, albergando a aproximadamente un tercio de los fumadores del planeta.
EN AMÉRICA SE ESPERA REDUCIR CONSUMO
Por otro lado, América presenta tasas más bajas de fumadores, con países como Panamá, Ecuador y Colombia manteniendo cifras establecidas entre el 6% y el 9%. De Bolivia no se tienen datos de la cantidad de fumadores. A pesar de que los datos con los que se cuenta en América son parciales, se espera una disminución del 30% en toda América para el año 2030. Sin embargo, la implementación de políticas efectivas para alcanzar esta meta es una tarea pendiente en muchos de estos países.
El impacto del tabaquismo en la salud pública es innegable. Además de las cifras abrumadoras de muertes directas, las enfermedades relacionadas con el tabaco representan una carga significativa para los sistemas de salud en todo el mundo. Las afecciones pulmonares, cardiovasculares y respiratorias, entre otras, generan costos económicos y sociales considerables. Las campañas de concientización y las políticas de control del tabaco se vuelven fundamentales para revertir esta epidemia y reducir su impacto en las generaciones futuras.
TABAQUISMO PASIVO
En el ámbito infantil, el tabaquismo pasivo se manifiesta como una amenaza silenciosa. Los niños expuestos al humo de tabaco enfrentan riesgos graves para su salud y desarrollo. Las crisis asmáticas, infecciones respiratorias recurrentes y otros problemas de salud son solo la punta del iceberg. Es imperativo que los gobiernos y las comunidades implementen medidas para proteger a los niños del tabaco y sus efectos nocivos.
La situación en Asia, con China a la cabeza, plantea un desafío significativo en la lucha contra el tabaquismo. Aunque las tasas de consumo muestran signos de declive, la magnitud del problema persiste. La necesidad de políticas eficaces de control del tabaco y de programas de prevención es urgente para cambiar la trayectoria actual y reducir la carga de enfermedades asociadas al tabaco.
América, a pesar de sus tasas relativamente bajas de fumadores en comparación con otras regiones, no está exenta de desafíos. No existen políticas proactivas ni la implementación de medidas preventivas eficientes que pueden obstaculizar los esfuerzos para reducir el consumo de tabaco en el continente. Es esencial que los gobiernos nacionales, pero también locales, refuercen sus compromisos y adopten medidas más enérgicas para lograr los objetivos de reducción de consumo de tabaco.
PREVENIR Y EDUCAR
La batalla contra el tabaquismo requiere un enfoque integral que abarque la prevención, la educación y la atención médica. Las campañas de concientización deben dirigirse tanto a los jóvenes como a los adultos, destacando los riesgos para la salud asociados con el consumo de tabaco en todas sus formas. La educación sobre los peligros del tabaco debe ser una parte integral del currículo escolar, asegurando que las generaciones futuras estén mejor informadas y equipadas para tomar decisiones saludables.
Además, la atención médica y el apoyo para dejar de fumar deben estar fácilmente disponibles. Los programas de cesación del tabaco y las terapias de reemplazo de nicotina pueden desempeñar un papel crucial en ayudar a los fumadores a abandonar este hábito perjudicial. La colaboración entre el sector de la salud, las organizaciones gubernamentales y la sociedad civil es esencial para implementar y mantener estas iniciativas a largo plazo.
PARA SABER
CONSUMIDORES PASIVOS
Los niños expuestos al humo de tabaco enfrentan riesgos graves para su salud y desarrollo. De cada 100 niños en el mundo, 10 se encuentran expuestos al cigarrillo.
CIFRA
43
millones de niños y jóvenes entre 13 y 15 años en 2021, fumaban.
10%
de los niños 10% se encuentran expuestos al humo del cigarrillo
* Dr. VÍCTOR HUGO VÁSQUEZ CHUNGARA, Médico General. Sociedad de Medicina Interna del Colegio Médico de Chuquisaca