Manteca o aceite
Introducida durante la conquista, vino desde Europa y se arraigó profundamente en la gastronomía americana
¿POR QUÉ SE DEJÓ DE USAR MANTECA SI ES MEJOR QUE EL ACEITE VEGETAL?
Introducida durante la conquista, vino desde Europa y se arraigó profundamente en la gastronomía americana, transformando sabores, métodos de cocción y recetas. Sin embargo, a lo largo del siglo XX, un cambio radical se gestó, impulsado por campañas mediáticas y discursos médicos que desencadenaron una guerra culinaria contra la manteca para posicionar el aceite vegetal industrial.
Esta lucha se intensificó en una “guerra de grasas”, en la que el aceite era presentado como más saludable, moderno e higiénico, desplazando en los 50 a la manteca.
Según la investigadora mexicana Sandra Aguilar, la transición fue difícil y recogió testimonios de la época que revelan que las personas experimentaban malestar estomacal al consumir aceite y a menudo lo mezclaban con manteca para hacerlo más tolerable. A pesar de los esfuerzos publicitarios, la aceptación de productos industrializados fue lenta hasta los años 70, cuando la escasez y el encarecimiento de la manteca en áreas urbanas, influyeron en el cambio de hábitos alimenticios.
BENEFICIOS NUTRICIONALES DE LA MANTECA
La nutricionista y dietista chuquisaqueña, Claudia Abastoflor dice que “es mejor para cocinar la manteca o mantequilla por la estabilidad que tiene este tipo de grasa ante el calor y termina siendo mucho menos dañina que los aceites”.
“Con una alimentación como era antes con menos comida basura y procesados, entonces si la salud va a encontrar beneficios”, dice Abastoflor por lo que recomienda prestar atención integral al estilo de vida de la persona porque dice que “de nada sirve dejar el aceite y empezar a consumir grasa si el resto de las comidas son malas para la salud”. Es importante recordar que, en nuestros países, la principal causa de muerte, son los accidentes cardiovasculares precedidos una afectación sobre los lípidos en la sangre (colesterol y triglicéridos).
CUAL ES LA MEJOR OPCIÓN
Nutricionistas sugieren que, frente a aceites vegetales refinados, la manteca de cerdo es una opción más saludable. Sin embargo, el aceite de oliva sigue siendo considerado también bueno por su estabilidad ante el calor y su calidad, como también lo es el aceite de coco, en comparación con otras grasas.
Aunque la industria alimentaria ha abogado por cambios a lo largo de los años, la manteca de cerdo sigue siendo una opción viable y saludable para aquellos que buscan mantener la autenticidad y la calidad en su cocina.
RECETA
HACER GRASA DE CERDO EN CASA
1
Compra de tu casera que vende cerdo, la parte más grasosa
2
Corta en cuadraditos pequeños
3
Ponla en una olla a fuego medio bajo hasta que poco a poco se vaya derritiendo.
4
Con una cuchara y mucha paciencia ve sacando la grasa y colócala en un recipiente limpio.
5
Mezcla regularmente y ve sacando la grasa.
6
Te quedará un chicharrón delicioso al final.
7
Guarda la manteca en un recipiente con tapa y utilízalo como materia grasa en tu cocina y contribuye a devolver la salud a tu familia
PARA SABER
LA MANTECA ES BUENA PARA LA SALUD
1
Es buena para el corazón o sea la manteca de cerdo es lo contrario a las grasas saturadas, se la conoce como grasa insaturada por lo que favorece la salud cardiovascular al elevar el colesterol “bueno” y prevenir el desarrollo del colesterol “malo”. Además, su proceso de cocinado es más eficiente y natural en comparación con algunos aceites procesados.
2
Combate estados depresivos debido a su contenido de ácido oleico ácido que se ha demostrado que contribuye a combatir la tristeza y las alteraciones en el estado de ánimo o en el humor
3
Es fuente de vitaminas y minerales.
4
Es sabrosa sin agregar azúcares, beneficiando a personas con diabetes.
5
Contribuye a la salud ósea por su contenido de fósforo.