El ruido nocivo de las ciudades

La contaminación acústica en las ciudades grandes y pequeñas, incluso en los poblados rurales, es un problema creciente que afecta la salud física y mental de las personas. Según un informe de la Agencia de la ONU para el Medio ambiente, los sonidos no deseados, prolongados y de alto nivel provenientes de parlantes de música, de bocinazos, del tráfico rodado o de otra índole, como actividades de ocio, pueden causar molestias crónicas, alteraciones del sueño y graves enfermedades cardíacas y metabólicas.

DECIBELES SEGUROS E INSEGUROS 

Mucho se habla de decibles que pueden causar daño auditivo en los seres humanos que varían según la exposición y el tiempo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que una persona puede estar expuesta a un nivel de ruido de hasta 70 dB durante las horas del día cuando está activo, por un tiempo prolongado sin sufrir daños auditivos, no así durante la noche cuando está descansando. Por ejemplo, en Japón por mencionar un solo país. A las 10 de la noche la ciudad debe permanecer en silencio para dejar dormir a las personas

El umbral de ruido a partir de los 85 decibeles se determina como perjudicial para la salud auditiva. La exposición continua a niveles superiores puede ocasionar daños en el oído, como pérdida de audición, entre otros problemas de salud que deterioran el nivel de vida y pueden traer consecuencias graves. 

RIESGOS DE DAÑO

Los ruidos con una intensidad mayor a 65 dB están catalogados como perjudiciales para el hombre. Por lo tanto, es importante evitar la exposición a sonidos de esta intensidad.

La exposición prolongada a niveles superiores a los 60 decibeles también puede provocar malestares físicos.

EFECTOS EN LA SALUD

Las molestias y alteraciones causadas por el ruido pueden conducir a enfermedades cardíacas, trastornos del sueño, trastornos metabólicos como la diabetes y problemas auditivos.

La contaminación acústica provoca aproximadamente 12,000 muertes prematuras al año en la Unión Europea y afecta a uno de cada cinco ciudadanos.

SOLUCIONES

Si las ciudades tienen normativas están deben cumplirse sin excepción y regularse sonidos de parlantes, fiestas, bocinas, tráfico vehicular

Incrementar las zonas verdes que ayudan a absorber la energía acústica de ruidos como el tráfico vehicular rodante, además de amplificar los sonidos naturales.

Carriles bici reducen indirectamente el espacio para la conducción y, por tanto, disminuyen el ruido de los vehículos a motor.

Zonas de bajas emisiones fomentando la movilidad eléctrica y mejorando la calidad del aire, contribuyendo a la reducción del ruido.

La contaminación acústica y sus consecuencias para la salud

El tráfico, la música de las discotecas, las aglomeraciones y otras fuentes de sonido, tienen una incidencia directa en el organismo humano, según los expertos consultados.

Según el Diccionario panhispánico del español jurídico de la Real Academia Española, la contaminación acústica o sonora es la “presencia en el ambiente de ruidos o vibraciones, cualquiera que sea el emisor acústico que los origine, que implican molestia, riesgo o daño para las personas, para el desarrollo de sus actividades o para los bienes de cualquier naturaleza, o que causan efectos significativos sobre el medioambiente”.

PROBLEMÁTICA LATENTE

La contaminación acústica es una problemática latente que tiene incidencia en la salud humana. Algo que no pasa desapercibido para los expertos y tampoco debería pasar despercibido para las autoridades

¿Qué ocurre en ciudades que están atestadas de sonidos provenientes del tránsito y de actividades humanas como fiestas, aglomeraciones y parlantes callejeros?

“Los ruidos de la ciudad pueden producir un trauma acústico o disminución de la audición por la exposición recurrente a los ruidos”, dijo Patricia Portillo Mazal, otorrinolaringóloga y médico, Buenos Aires. Agregó que como forma de prevención individual, es fundamental no agregar más ruidos al entorno, como por ejemplo escuchar música con auriculares en la calle, como disminuir los sonidos dentro de casa y en del auto, así como evitar el uso de la bocina. En un plano más general, las ciudades deberían regular el tránsito”.

LA OMS Y LOS RUIDOS

La OMS le da mucha importancia a la contaminación sonora que ocurre cuando hay presencia de ruidos molestos o ensordecedores para las personas porque un alto porcentaje de fallecimientos tienen su raíz en la contaminación sonora como también el desarrollo de varias enfermedades, como lo demuestran estudios que evidencias que es un tema de salud pública.

Para la OMS, la exposición promedio al ruido del tráfico no debe superar los 53 decibeles. Este cálculo se publicó en el Compendio de Salud y Medioambiente del organismo.

Los sonidos continuos, constantes o intermitentes de esta contaminación son uno de los factores ambientales que afecta la salud en general, según explicó la doctora Sandra Graizer, fonoaudióloga jefa de la División de Audiología y Terapia del Lenguaje del Hospital Rocca. Entre esos problemas de salud la especialista que habló con Infobae menciona que, además de la disminución auditiva, tinnitus o zumbidos molestos, están los trastornos del estrés, cansancio por un mal descanso, depresión, ansiedad o dificultades para conciliar el sueño. Un conjunto de elementos que pueden afectar desde la capacidad de concentración, bajo rendimiento laboral e intelectual, disminución de la memoria, incremento de la presión arterial, dolores de cabeza y tensión muscular, entre otros detallados por la doctora. “Para tener un sueño reparador y descansar en la noche, no deberíamos estar ante una intensidad mayor a 35 decibeles”. Precisó.

Por tu parte Beatriz Garzón, investigadora del Conicet realizó estudios en áreas rurales de Argentina donde constató que la contaminación acústica afecta a toda la sociedad por lo que es imprescindible desarrollar acciones efectivas y campañas de concientización sobre los riesgos que implica el ruido.

OPINIÓN DE UN PSICÓLOGO

El psicólogo Alexis Alderete, especialista en trastornos de ansiedad, dijo que: “La constante y diaria exposición a niveles elevados de ruido en las grandes ciudades puede provocar estrés crónico, ansiedad y cambios en la calidad del sueño, reflejado en síntomas de irritabilidad constante, afectando la vida laboral y personal, la concentración y la productividad. “La disminución de la calidad del sueño por el ruido nocturno (…) puede interrumpir el sueño y provocar insomnio. El sueño deficiente tiene un impacto significativo en la salud mental”, Concluyó.

 Los más afectados son los jóvenes, los ancianos y las comunidades marginadas cerca de carreteras con mucho tráfico y zonas industriales.

Incluso los animales que habitan en entornos urbanos, como aves, ranas e insectos, sufren el ruido que afecta su comunicación acústica y supervivencia.

TIPOS DE MORDIDA

EL RUIDO MATA PERSONAS

12,000 muertes prematuras al año son producidas por la contaminación acústica en la Unión Europea donde uno de cada cinco ciudadanos es afectado. No hay investigaciones en Bolivia de las muertes causadas por el ruido.

AFECTA A TODOS

Jóvenes, ancianos y la comunidad en general está afectada por los ruidos externos producidos por parlantes, bocinas, autos, fiestas, sonidos industriales y otros, poniendo en riesgo su salud y su vida.

SUFREN LOS ANIMALES

Incluso los animales que habitan en entornos urbanos desde mascotas, como los perros y los gatos, así como las aves, ranas y hasta insectos como las abejas, sufren el ruido que afecta su comunicación acústica y supervivencia.

PARA SABER

MÁXIMO RUIDO PERMITIDO 

La Normativa vigente en Bolivia de acuerdo a parámetros establecidos por la OMS, señalan que lo máximo de ruido permitido en lugares de contaminación acústica es 65 Decibeles. Lo que supere ese rango de sonido, es un delito porque afecta la vida y la salud de las personas, pero también de los animales. 

 

* El Dr. Herland Cabezas Urioste, Especialista en emergentologia. toxicología y aeromedicina, trabaja en el hospital nacional Posadas y en el Centro Nacional de Intoxicaciónes (Argentina)