Tendinitis en el pie

La tendinitis en el pie acontece cuando se inflama el tendón de Aquiles que conecta los músculos de la pantorrilla con el talón que suele irradiarse a la planta del pie. 

La tendinitis o inflamación de los tendones en el pie afecta a cualquier persona de cualquier edad, sobre todo a aquellas que realizan actividades físicas intensas, que están de pie durante largos períodos, pero también a aquellas que asumen una vida sedentaria. De una u otra forma, esta afección puede ser dolorosa y limitar las actividades cotidianas, pero con los cuidados adecuados es posible aliviar los síntomas y prevenir su recurrencia.

SÍNTOMAS

El síntoma principal de la tendinitis es el dolor en el talón y la planta del pie, que suele empeorar con el movimiento o después de períodos prolongados de actividad. Otros síntomas incluyen:

• Hinchazón en la parte inferior del pie.

• Sensibilidad al tacto, especialmente cerca del arco o el talón.

• Rigidez matutina, que mejora después de caminar un poco.

• Dificultad para caminar o realizar actividades físicas.

¿QUÉ PASA DENTRO DEL PIE?

En la tendinitis, los tendones que conectan los músculos de la planta del pie con los huesos se inflaman debido a microdesgarros o fricción excesiva. Esto genera dolor, limitación del movimiento y, si no se trata, puede llevar a complicaciones como la degeneración del tejido tendinoso.

TRATAMIENTOS

Además de la medicación que ayuda controlar la inflamación y el dolor, se requiere iniciar una terapia de estiramientos y acudir a un fisioterapeuta para que la sanidad sea duradera. El especialista ayuda a diseñar ejercicios para hacer en casa que fortalezcan la musculatura de la zona del pie y mejoren la movilidad.

Inyecciones con corticoides se usan en casos graves y alguna vez la cirugía en casos crónicos donde otros tratamientos no han sido efectivos. Lo más importante es introducir hábitos adecuados como el uso de un buen zapato deportivo, estirarse y evitar la vida sedentaria.

CUIDADOS EN CASA

El manejo de la tendinitis plantar comienza con medidas simples para aliviar los síntomas:

• Descanso: Evitar actividades que generen estrés en los tendones, como correr o cargar peso excesivo.

• Hielo: Aplicar compresas frías durante 15-20 minutos varias veces al día ayuda a reducir la inflamación.

• Estiramientos: Ejercicios suaves para estirar la fascia plantar y los músculos de la pantorrilla pueden aliviar la rigidez.

• Calzado adecuado: Usar zapatos con soporte para el arco y buena amortiguación es fundamental. Plantillas ortopédicas pueden ser útiles. El mejor zapato son unos buenos calzados deportivos que respetan la forma natural del pie.

PRINCIPALES CAUSAS

La tendinitis plantar suele originarse por el uso excesivo o incorrecto de los tendones en el pie. Las causas más frecuentes incluyen:

• La sobrecarga

Actividades de alto impacto como correr, saltar o caminar largas distancias sin el calzado adecuado, especialmente con el zapato completamente chato o plano como son los mocasines sin taco alguno.

• La biomecánica

Hay condiciones que afectan la biomecanica o el movimiento saludable de los pies, como por ejemplo los pies planos, los arcos muy pronunciados o problemas de alineación pueden generar presión excesiva en los tendones.

• Calzado inadecuado

Usar zapatos sin soporte adecuado, especialmente durante actividades físicas, puede contribuir al desarrollo de la tendinitis. De entre todo los peores son los zapatos planos totalmente. 

• Envejecimiento

A medida que pasan los años y alrededor de los 40 años, se pierde de elasticidad en los tendones y por lo tanto se incrementa la posibilidad de sufrir lesiones.

• Sobrepeso

El exceso de peso ejerce presión adicional a todas las articulaciones, pero los que finalmente sostienen todo el peso, son los pies, sobrecargando los tendones.