Recrudece la violencia racial tras la muerte de un joven negro
La Policía persiguió, alcanzó y disparó a un individuo de 23 años que iba armado
El gobernador del estado de Wisconsin, en el norte de Estados Unidos, activó la Guardia Nacional del distrito tras los enfrentamientos entre una multitud y la Policía a causa de la muerte de un sospechoso afroamericano armado a manos de los agentes, en un nuevo hecho de tensión racial.
Los agentes llamaron a la calma con la esperanza de que la violencia no se reanude, luego de que seis tiendas fueran incendiadas y saqueadas el sábado. También resultaron incendiados seis vehículos de la Policía.
"Fue algo que nunca vi en mi vida adulta en esta ciudad y espero no volver a verlo jamás", dijo el alcalde de la ciudad, Tom Barrett, quien pidió a los padres mantener a sus hijos lejos del área donde ocurrieron los disturbios.
Al menos 200 personas participaron durante horas en enfrentamientos con la Policía. Los manifestantes lanzaron piedras y también provocaron un incendio en una gasolinera con disparos, informó el departamento de Policía local en su cuenta de Twitter. Fueron arrestadas 17 personas y cuatro agentes resultaron heridos, dijo el jefe de Policía Edward Flynn.
En la tarde del sábado la Policía paró un automóvil con dos sospechosos, que huyeron a pie del lugar. En la persecución un agente mató a uno de ellos, Sylville Smith, de 23 años, quien iba armado y tenía un largo prontuario policial, dijo Barrett. El oficial involucrado también era negro, agregó.
Imágenes capturadas por la cámara incorporada en el traje del agente de Policía "demuestran sin duda que él (sospechoso) tenía un arma en la mano", precisó el alcalde.
La Guardia Nacional, que sirve como fuerza de reserva del Ejército pero es utilizado habitualmente en respuesta a catástrofes, está actualmente activa a pedido de la Policía local, dijo en un comunicado el gobernador del estado, Scott Walker.
Un concejal de Milwaukee, Khalif Rainey, dijo en la rueda de prensa que el tiroteo y la violencia posterior muestran la creciente tensión que hay entre la comunidad negra de la ciudad y la Policía.
"Nadie puede negar el hecho de que hay problemas, problemas raciales aquí en Milwaukee, Wisconsin, que tienen que ser no solamente examinados, sino corregidos", dijo Rainey.