Reabre juicio que puede acabar gestión de Temer
En el proceso también está implicada la ex presidenta Dilma Rousseff, candidata en 2014
PROCESO. El presidente de Brasil, Michel Temer, durante un reciente acto público. El Tribunal Superior Electoral de Brasil retomó ayer el proceso que decidirá si la campaña que Dilma Rousseff y Michel Temer compartieron en 2014 fue financiada con dinero de la corrupción, lo que pudiera desalojar del poder al actual Mandatario.
El presidente de la corte, Gilmar Mendes, declaró abierta la primera de las audiencias reservadas para este caso, que por primera vez en sus 85 años este tribunal sienta en el banquillo a los dos miembros de una fórmula elegida en unos comicios presidenciales.
El juicio había comenzado el pasado abril pero fue suspendido para escuchar a nuevos testigos, y fue retomado en medio de una gravísima crisis que se cierne sobre Temer, también investigado en la Corte Suprema por los supuestos delitos de corrupción pasiva, obstrucción a la justicia y asociación ilícita.
La corte reservó esta semana para el análisis de este caso, pero el proceso pudiera ser suspendido en cualquier momento si uno de los siete miembros del tribunal solicita más tiempo para estudiar los cargos, lo que postergaría la sentencia por un plazo indefinido.
Los abogados de Temer también demandan que las cuentas de las campañas de ambos sean juzgados en forma separada, pues alegan que cada uno se ocupó de su propia recaudación y que en el caso del actual Mandatario no hubo fraudes.
La defensa de la ex presidenta brasileña demandó la anulación de un proceso porque éste "se basa en falsos testimonios y pruebas inválidas", según dijo su abogado, Flavio Caetano.
Las elecciones de 2014 llevaron a Rousseff a la Presidencia y a Temer a la vicepresidencia, aunque la Mandataria fue destituida por irregularidades fiscales en agosto pasado.
Asimismo, el Presidente brasileño tendrá hasta el viernes para responder las preguntas de la Policía Federal sobre las sospechas de corrupción que pesan en su contra, según informó la Corte Suprema.
El cerco jurídico en torno a Temer se cerró aún más con la detención de Henrique Eduardo Alves, un ex ministro de su entorno cercano, horas antes del reinicio del juicio que le puede costar el cargo.
