El feroz incendio forestal no da tregua en Portugal
Portugal continuaba ayer sin lograr controlar el gran incendio que azota el centro del país desde el pasado sábado y que, no sólo no ha remitido como se esperaba, sino que se extendió hacia el norte.
Portugal continuaba ayer sin lograr controlar el gran incendio que azota el centro del país desde el pasado sábado y que, no sólo no ha remitido como se esperaba, sino que se extendió hacia el norte.
Más de 3.000 efectivos, entre bomberos, miembros de Cruz Roja y del ejército, trabajan en la zona más afectada para sofocar las llamas y prestar ayuda a las personas de las numerosas aldeas evacuadas.
Los mayores incidentes se registraron en las comarcas de Góis y Pampilhosa da Serra, donde fueron desalojadas una treintena de pueblos ante la amenaza del voraz incendio.
Además, una de las principales vías de comunicación entre las poblaciones de la Sierra de Lousã, la carretera nacional 112, fue cortada a cualquier vehículo que no fuese oficial para evitar que pudieran ser atrapados por las llamas, como ocurrió en las primeras horas de la tragedia.
La lengua más al norte del incendio, hacia donde sopla el fuerte viento, se sitúa en la población de Soerinho, lo que revela el considerable avance del fuego.