Chile: Enviados del Papa intentarán recuperar la fe
Los dos sacerdotes enviados por el papa Francisco a Chile intentarán recomponer la fe en la dividida diócesis sureña de Osorno, marcada a fuego por la renuncia de su obispo Juan Barros y otros dos obispos, acusados...
Los dos sacerdotes enviados por el papa Francisco a Chile intentarán recomponer la fe en la dividida diócesis sureña de Osorno, marcada a fuego por la renuncia de su obispo Juan Barros y otros dos obispos, acusados de encubrir los abusos sexuales contra menores que cometió el influyente religioso Fernando Karadima.
El arzobispo maltés Charles Scicluna y el sacerdote español, Jordi Bertomeu, que llegaron ayer a Santiago, dedicarán cuatro de los ocho días que estarán en la nación austral, para conversar en esa ciudad, situada 942 kilómetros al sur de la capital chilena, con los fieles e indagar otros abusos sexuales cometidos por el clero chileno.
Scicluna, quien ofreció un breve comunicado en la sede diplomática de la Santa Sede en Chile, repite su visita a este país al igual que Bertomeu, ya que en febrero recogieron el testimonio de decenas de personas que acusaban a Barros y a otros religiosos de presuntos abusos sexuales.
Los enviados de Francisco se reunirán tanto en Santiago como en Osorno con víctimas de abusos para avanzar en la reparación en medio de la peor crisis en la historia de la Iglesia católica chilena.
Scicluna explicó a la prensa que su misión pastoral en Chile será prestar una ayuda "técnica y jurídica" concreta para las curias diocesanas de este país y que "puedan dar respuestas adecuadas a cada caso de abuso sexual de menores cometidos por clérigos o religiosos".
Los enviados papales permanecerán en Santiago hasta el jueves. Ese día viajarán a la sureña ciudad de Osorno, donde estarán hasta el domingo, y después regresarán a la capital hasta el martes de la próxima semana, aunque oficialmente no trascendieron los detalles del viaje.