Odebrecht: Alan García solicita asilo en Uruguay
La Fiscalía quiere evitar que el ex Presidente eluda el proceso como lo hizo en 1992
El ex presidente peruano Alan García Pérez solicitó asilo en la embajada de Uruguay en Lima después de que un juez le prohibiera salir del país por 18 meses mientras es investigado por una presunta colusión agravada y lavado de activos en el caso Odebrecht en Perú.
El Ministerio de Relaciones Exteriores informó, a través de un comunicado que el embajador de Uruguay en Perú, Carlos Alejandro Barros, comunicó la mañana de ayer que García ingresó en horas de la noche del sábado a su residencia y que solicitó asilo a dicho país, conforme a lo dispuesto por la Convención sobre Asilo Diplomático de 1954, de la cual son parte Perú y Uruguay.
El Gobierno de Uruguay deberá evaluar ahora el pedido de García, quien es investigado por el fiscal contra el lavado de activos José Domingo Pérez por presuntamente haber recibido un pago de Odebrecht por 100 mil dólares para dictar una conferencia en Brasil, a través de un intermediario.
Precisamente el sábado, la Justicia peruana impuso a García un impedimento de salida del país por 18 meses, una medida a la que el ex Mandatario dijo "allanarse" y que consideró que "no era una sanción".
La Fiscalía peruana solicitó el pasado jueves esta medida de restricción contra García, presidente entre los años 1985-1990 y 2006-2011, en el marco de las investigaciones que se siguen en su contra por presuntamente haber favorecido a la empresa Odebrecht en la licitación del Metro 1 de Lima.
El juez Juan Carlos Sánchez Balbuena, del Segundo Juzgado de Investigación Preparatoria Anticorrupción, valoró el sábado que "existen suficientes elementos de convicción" para declarar fundada la medida.
Sánchez consideró que documentos entregados por Odebrecht en el marco de una colaboración eficaz con la fiscalía brasileña, infieren que el dinero que García recibió de la empresa provenía de fuente ilícita, por lo que señaló que "amerita no solo la investigación en este caso, sino la imposición de la medida a fin de que los hechos sean aclarados".
García justificó ayer su pedido de asilo diplomático por el "clima de persecución política" que vive su país impulsado por el afán del Ejecutivo de Martín Vizcarra para "copar las instituciones".
"Hoy, una vez más, en mi patria, las leyes y procedimientos se desnaturalizan y manipulan por intereses políticos como instrumentos de persecución (...) En mi país, la guerra por copar las instituciones y la Fiscalía de la Nación ha creado un clima de indefensión jurídica, donde ni la verdad ni la ausencia de pruebas valen ante el afán de usar los procedimiento investigatorios, extremando abusivamente sus ilícitas atribuciones", denunció.
Entretanto, el presidente Vizcarra descartó la existencia de una persecución política contra el ex Mandatario y remarcó que el Poder Judicial y el Ministerio Público tienen total independencia en sus investigaciones.
“Son temas que corresponden a la independencia del Poder y el Ministerio Público. Nosotros no intervenimos, ellos tienen total independencia y ustedes pueden dar fe de ello”, sostuvo.