Fracasa en la ONU afán de EE.UU. por intervenir crisis de Venezuela
Tras recibir el apoyo de Jair Bolsonaro en Brasil, Juan Guaidó llega a Paraguay y dice que volverá a Caracas hasta este lunes

El Consejo de Seguridad de la ONU volvió a ser escenario ayer de las profundas diferencias sobre Venezuela que mantienen Estados Unidos y Rusia, que intentaron sin éxito sacar adelante sendas resoluciones sobre la crisis en el país caribeño.
La propuesta de resolución de EE.UU., que planteaba la celebración de elecciones libres, logró los apoyos de nueve de los 15 países, pero chocó con el veto de Rusia y China, que apoyan al presidente venezolano, Nicolás Maduro, y consideran las presiones estadounidenses y de la Unión Europea una injerencia en los asuntos internos del país.
"Tuvimos que utilizar el derecho de veto porque el proyecto de Estados Unidos no es para resolver los problemas en Venezuela, por eso presentamos una alternativa que podría haber ayudado al pueblo de Venezuela sin una intervención foránea para que resuelva sus problemas", dijo el representante ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia, para justificar la postura de su país.
Nebenzia insistió tras el fracaso de las dos votaciones: "Muchas delegaciones han dicho que es necesario que haya elecciones lo más pronto posible en Venezuela: elecciones o no, eso es algo que debe decidir el pueblo venezolano; no decidan por ellos".
El plan de Rusia, que abogaba por la no intromisión en los asuntos internos de Venezuela, sólo contó con el respaldo de China, Sudáfrica y Guinea Ecuatorial, muy lejos de los nueve votos necesarios para ser aprobado.
Tras la votación, el enviado especial de EE.UU. para Venezuela, Elliott Abrams, aseguró que "lamentablemente, al votar en contra de esta resolución (la estadounidense), algunos miembros de este Consejo continúan protegiendo a Maduro y a sus amigos, y prolongando el sufrimiento del pueblo venezolano".
Según Abrams, "independientemente de los resultados de la votación de hoy, esta resolución muestra que las democracias en todo el mundo, y especialmente en América Latina, se están movilizando en apoyo del presidente interino (Juan) Guaidó".
"Los Estados Unidos se mantendrán firmes en el apoyo al gobierno legítimo de Guaidó y la Asamblea Nacional. Esperamos elecciones genuinamente libres y justas (...). Estados Unidos buscará todos los medios para aumentar la asistencia humanitaria a los venezolanos tanto dentro como fuera de su país", concluyó el representante estadounidense.
Ambas resoluciones estaban abocadas al fracaso, como reconocían horas antes de la reunión representantes permanentes como la embajadora británica Karen Pierce.
"Creo que tenemos que ser realistas, es muy poco probable que el Consejo sea capaz de llegar a un acuerdo", dijo Pierce, cuyo país apoyó la resolución presentada por Estados Unidos.
Durante la reunión, la diplomática británica destacó que había apoyado el plan estadounidense porque "enfatiza la importancia de establecer las condiciones necesarias para un nuevo y creíble proceso electoral en Venezuela".
Ante los medios, el representante francés, François Delattre, negó que el proyecto estadounidense supusiera una base legal para el uso de la fuerza y para minar la soberanía de Venezuela, como alegan Rusia y China.
Para Francia, el texto ruso, sin embargo, "ofrece la ilusión de una Venezuela pacífica, pero más de tres millones y medio de personas han abandonado el país. Nadie puede negar la crisis humanitaria y las consecuencias para toda la región y el borrado ruso, en su estado actual, no menciona (la crisis) humanitaria".
En este sentido, Nebenzia acusó a EE.UU. y a los países europeos de haber pergeñado un plan para justificar un cambio de Gobierno en Venezuela.
En la reunión también intervino el representante permanente de Venezuela, Samuel Moncada, que calificó a Estados Unidos y al Reino Unido de "potencias coloniales" que llevan a cabo "una acción de rapiña y pillaje" bajo la excusa del "humanitarismo"
Venezuela vive una situación de inestabilidad política desde el 10 de enero, cuando Maduro volvió a tomar posesión del cargo de presidente tras imponerse en las elecciones de mayo pasado, no reconocidas por parte de la comunidad internacional.
El 23 de enero, el opositor Juan Guaidó invocó varios artículos de la Constitución venezolana para defender que, como jefe del Parlamento, podía declararse presidente interino del país al considerar "ilegítima" la toma de posesión de Maduro.
Informe sitúa a Venezuela como grave infractor
Venezuela se situó en 2019, por segundo año consecutivo, como el país menos apegado al Estado de Derecho en el mundo, según un estudio difundido ayer en Washington, que evalúo la situación de 126 naciones desde la perspectiva de los límites al poder del Gobierno, la justicia y la corrupción.
El Índice de Estado de Derecho, elaborado desde 2008 por la organización no gubernamental World Justice Project (WJP), situó a Dinamarca, Noruega, Finlandia, Suecia y los Países Bajos al frente de esa clasificación que tiene como base encuestas a personas y expertos de cada uno de los países evaluados.
Venezuela "no solamente bajó la posición sino también el puntaje absoluto (de 0,29 a 0,28)", explicó el director de investigación del WJP, Alejandro Ponce, quien agregó que esto indica que la situación en ese país "es peor que la del año pasado, más allá de la inclusión de nuevos países".
El país sudamericano pasó del puesto 113 el año pasado al 126.
Juan Guaidó afirma que "a más tardar" estará en Caracas el lunes, pese a amenazas en Venezuela
El jefe del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, fue recibido ayer en Brasilia por el mandatario Jair Bolsonaro como presidente "legítimo" de su país y anunció que "a más tardar" estará de vuelta el lunes en Caracas, "pese a las amenazas".
Guaidó llegó a la capital brasileña la noche del miércoles desde Colombia, adonde había viajado para encabezar el intento de llevar a Venezuela la ayuda humanitaria donada por varios países, que se frustró el pasado sábado por el cierre de fronteras ordenado por el Gobierno de Nicolás Maduro.
Tras una reunión con embajadores de países que le reconocen como presidente "legítimo", fue recibido en la sede del Gobierno por Bolsonaro, quien le expresó su pleno apoyo a la "lucha" de Venezuela "por recuperar la democracia y la libertad".
Según Bolsonaro, Guaidó representa una "esperanza" para todos los venezolanos y el resto de los latinoamericanos.
En nombre del "pueblo venezolano", Guaidó agradeció a Bolsonaro por el apoyo que Brasil le ha dado a "la lucha" por sustituir al Gobierno de Nicolás Maduro y "recuperar la democracia", para que Venezuela pueda volver "al camino del progreso".
Admitió además que ha recibido amenazas y que puede ir a la cárcel por no observar una prohibición de salida dictada por un juez que le investiga por su proclamación como presidente interino, el pasado 23 de enero, después de que la Asamblea Nacional, "de acuerdo a los términos constitucionales", declaró "usurpador del poder" a Maduro.
Aún así, aseguró que tiene previsto regresar a Venezuela durante el próximo fin de semana o "a más tardar el lunes", tras cumplir una "agenda internacional" que continuará hoy, viernes, en Paraguay y que, según dijeron fuentes de su entorno, puede continuar el sábado en Argentina.
También recibió invitaciones de los gobiernos de Chile y Ecuador.