Fuerte temblor inquieta la zona sur de California
El sismo se pudo sentir en el área de Los Ángeles e incluso en el área de Las Vegas

Un terremoto de magnitud 6.4 sacudió ayer el sur de California y se pudo sentir en todo el área de Los Ángeles, a más de 300 kilómetros al sur del epicentro, y en Las Vegas, a más de 200 kilómetros hacie el este.
La tierra tembló a las 10:33 locales cerca de Ridgecrest, una localidad en una zona relativamente despoblada del interior de California. Una hora después se habían contabilizado hasta 11 réplicas.
El terremoto fue registrado en un principio como magnitud 6.6 por el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS). Una hora y media después del movimiento inicial se habían registrado ya 50 réplicas, algunas de magnitud superior a 4.0.
Se trata del terremoto más importante que se haya sentido en las grandes ciudades de California desde el que afectó Napa con una magnitud de 6.0, que sacudió todo San Francisco de madrugada en 2014. En aquella ocasión, el derrumbe de algunas estructuras provocó decenas de heridos.
En los alrededores de Ridgecrest (28 mil habitantes) se registraron varios incidentes como consecuencia del terremoto, pero no hubo daños personales.
El Departamento de Bomberos del condado de Kern, donde se localizó el epicentro, informó en Twitter de la atención de dos docenas de incidentes, desde asistencia médica hasta al menos dos incendios en viviendas.
El Departamento también confirmó que al menos 15 pacientes habían sido evacuados del hospital regional como medida de precaución. Ninguna ciudad había comunicado a mediodía daños en las infraestructuras críticas como aeropuertos o autopistas.
En el condado de San Bernardino se produjeron algunas roturas de cañerías y se cayeron algunos postes de la luz, según la oficina del sheriff.
La región lleva años preparándose para el Big One
El sur de California es una de las zonas sísmicas más activas del mundo. Hay miles de terremotos al día, la mayoría de ellos imperceptibles. California lleva años preparándose para el llamado Big One, el gordo, que sería un terremoto en la falla de San Andrés. Se trata de una falla gigante que recorre desde la frontera con México, envuelve la ciudad de Los Ángeles y pasa por San Francisco.
La sismóloga Lucy Jones, de la Universidad Tecnológica de California en Pasadena, tuiteó poco después del terremoto de ayer que no se trataba de la falla de San Andrés. La aclaración es pertinente porque la preocupación popular es que cualquiera de estos terremotos pueda provocar un movimiento en la falla que desencadene el Big One. La falla de San Andrés tiene tensión acumulada para provocar un terremoto en cualquier momento entre ahora mismo y los próximos 100 años.
El terremoto se produjo muy cerca de la superficie, explicó Jones en una conferencia de prensa, lo que explica que se sintiera tan lejos del epicentro. Jones dijo que el temblor probablemente produjo una ruptura en la superficie. Una hora después del terremoto los sismólogos aún no habían llegado a Ridgecrest para comprobarlo. Jones añadió que la magnitud en la zona de Los Ángeles había sido alrededor de 3.0, por lo que era "extremadamente improbable" que hubiera daños en estructuras.