Afectados en una redada temen la falta de empleo
La preocupación se apodera de las familias inmigrantes afectadas por la redada masiva de la semana pasada en Misisipi (EE.UU.), ante las perspectivas de que los procesos migratorios de los detenidos demoren meses y la falta de empleo en las plantas de pollo, su principal fuente de trabajo.

La preocupación se apodera de las familias inmigrantes afectadas por la redada masiva de la semana pasada en Misisipi (EE.UU.), ante las perspectivas de que los procesos migratorios de los detenidos demoren meses y la falta de empleo en las plantas de pollo, su principal fuente de trabajo.
Las "familias ahorita están tristes, agobiadas, no tienen trabajo", relató Enrique, un obrero de origen mexicano que quedó desempleado tras el operativo que el pasado 7 de agosto afectó a la empresa en la que trabajaba en la localidad de Morton y a la que no había acudido ese día.
Según Enrique, que prefirió usar este nombre para no revelar su identidad, "la mayoría de la gente trabaja" en las plantas, donde él recibía 2 dólares por cada una de las 50 cajas de piezas de pollo que debía llenar en una jornada regular, lo que le "daba para comer".
"A la planta ya no regresa la gente, porque trabajábamos con otro nombre, otro papel, ahorita quieren ellos verdadero nombre o con papeles dependiendo el trabajo que quieran en la planta, pero como todos nosotros los que estamos afectados no tenemos eso...", admitió este joven de 22 años y con cinco en Estados Unidos, a donde admite llegó como "mojado" (indocumentado).
Y aunque esta misma semana logró conseguir un puesto temporal en la reparación de una casa, admitió que es "duro", ya que debe trabajar a pleno sol y sin conocer a ciencia cierta cuánto le van a pagar ni qué va a pasar con el salario que debía recibir de la planta.
Una voluntaria social que se identificó como "Teresa" explicó que alrededor de un centenar de trabajadores resultaron afectados por la redada sin que les hubiesen entregado su último pago.