El Estado peruano gana juicio por Machu Picchu
El Estado peruano sumó ayer una nueva victoria judicial en los litigios que les plantearon dos familias que reclamaban la propiedad de las ruinas de la ciudadela inca de Machu Picchu, la principal atracción turística del país.
El Estado peruano sumó ayer una nueva victoria judicial en los litigios que les plantearon dos familias que reclamaban la propiedad de las ruinas de la ciudadela inca de Machu Picchu, la principal atracción turística del país.
El ministro peruano de Cultura, Luis Jaime Castillo, anunció que la Corte Superior de Justicia de la región de Cusco, donde se encuentra Machu Picchu, declaró infundada la demanda de la familia Abrill, que afirmaba ser la legítima propietaria de las 13.000 hectáreas donde están los restos arqueológicos.
Por ello las hermanas Roxana y Victoria Abrill pedían además al Estado peruano una indemnización de 100 millones de dólares por el uso de esas 13 mil hectáreas de tierras para la explotación turística.
La demanda de las hermanas Abrill fue interpuesta en 2003, cuando iniciaron este prolongado litigio que el martes consumió la etapa en la Corte Superior de Justicia de Cusco.
Castillo recordó que en Perú "el patrimonio cultural arqueológico es propiedad del Estado, y a veces esa propiedad se disputa".
"Al final creo que ha primado el derecho inalienable de todos los peruanos de defender aquellos baluartes de nuestro patrimonio cultural como Machu Picchu", señaló.
El ministro precisó que, en el caso de la joya arquitectónica de los incas, hubo durante los últimos 40 años diferentes demandas de familias que en su momento tuvieron algún tipo de propiedad o posesión en la zona de Machu Picchu.