Tribunal de Ecuador decidirá este viernes si anula la detención del exvicepresidente Glas
Andrés Villegas, abogado de Glas, argumentó que la captura del exvicepresidente acuatoriano fue ilegal
El tribunal que delibera la petición del exvicepresidente de Ecuador Jorge Glas de que se anule su detención realizada dentro de la Embajada de México en Quito tras haber recibido asilo y ordene al Estado ecuatoriano entregarlo nuevamente a México revelará este viernes su decisión.
Una fuente de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) confirmó a EFE que la audiencia instalada el jueves se suspendió a las 04:15 de la madrugada de este viernes (09:15 GMT) para que los jueces deliberen.
Además, aseveró que la audiencia se reinstalará a las 15:00 horas de este viernes (08:00 GMT) y en ella se conocerá la resolución de los jueces.
En la audiencia, Andrés Villegas, abogado de Glas, argumentó que la captura del exvicepresidente de Rafael Correa fue ilegal al no atenderse a ningún criterio reglamentado y arbitraria por haberse violado sus derechos humanos al privarle del asilo que le había otorgado México.
Por ello, el letrado pidió a la sala de la CNJ que evalúa el habeas corpus que sea puesto de nuevo en libertad y entregado a la misión diplomática más cercana, tras haber cerrado México su Embajada en Quito luego de la irrupción policial para detener a Glas o una embajada de otro país que se comprometa también a acogerlo como asilado.
Villegas cuestionó que el informe policial sobre la operación para la detención haya sido declarado "secreto" para que no se conozcan los detalles y señaló que "es evidente que no existió orden de allanamiento" contra la Embajada de México y que tampoco se le consultó previamente a la misión diplomática la posibilidad de realizar esa diligencia, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El abogado insistió en que se violó el principio de inviolabilidad de misiones diplomáticas, "y se llevaron bienes muebles como celulares y hasta una tableta electrónica de Jorge Glas", quien se declara como "perseguido político".
En su intervención en la audiencia desde la cárcel, Glas indicó que fue presuntamente golpeado por los policías que lo detuvieron, que le dislocaron dos dedos y que lo sacaron de la Embajada esposado y cargado con los brazos atrás, en "una posición de tortura".
Glas también señaló que el asilo otorgado por parte del Gobierno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, es "un reconocimiento" de que es "un perseguido político", lo que sostiene para declararse como inocente frente a los procesos judiciales y condenas en su contra.
Por su parte, la jueza de Garantías Penitenciarias de la CNJ, Melissa Muñoz, recordó que en el momento que Glas ingresó a la Embajada de México no tenía orden de detención, la cual fue emitida después por encontrarse imputado por presunto peculado (malversación de fondos públicos) en el caso de la reconstrucción de Manabí, la provincia más afectada por el terremoto de 2016.
Asimismo, precisó que Glas, que fue vicepresidente de Correa (2007-2017) y al inicio de la Administración de Lenín Moreno (2017-2021) debía volver a prisión para terminar de cumplir una pena de ocho años, producto de dos condenas por cohecho y asociación ilícita emitidas en años anteriores.
De su lado, la ministra de Interior y Gobierno, Mónica Palencia, justificó el jueves en la audiencia la detención de Glas en que para el Ejecutivo ecuatoriano nunca hubo asilo para el exvicepresidente, pues la Convención de Asilo Diplomático sostiene que no puede otorgarse a quien esté procesado por delitos comunes.
También descartó cualquier persecución hacia Glas, "que ha venido siendo procesado desde 2017, cuando (Daniel) Noboa aún no era presidente, y no por delitos políticos".
La detención de Glas llevó a México a romper relaciones con Ecuador y a denunciarlo ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya por considerar que ha sido violada tanto su soberanía como el derecho internacional.