Marset afirma que su esposa se entregó y advierte con destituir a la juez y al fiscal responsables del caso
“Ella decidió irse a entregar a España a resolver su problema. La policía no hizo nada”, aseguró el narcotraficante uruguayo
El narcotraficante Sebastián Marset afirmó este domingo que su esposa, Gianina García Troche, se entregó a las autoridades de España y que “no es ninguna delincuente”.
“Espero que salga a la luz que se ha perseguido todo este tiempo a una persona inocente, solo por ser mi mujer. Espero que, con los abogados, se pueda demostrar la falsedad de los delitos por la cual la quieren imputar. Es claro que no es ninguna delincuente”, dijo el líder del Primer Cartel Uruguayo en un audio enviado al programa uruguayo “Santo y Seña”.
“Los delincuentes son los paraguayos que tienen a cargo este caso, por perseguir a una persona inocente. Pero esa estrategia se les va a caer muy pronto. Yo me encargaré, después de esto, que mínimo destituyan de su cargo a la juez y al fiscal. Les corresponde pagar con cárcel por todos los daños que han ocasionado a mi mujer y mis hijos. Por sufrir esa situación, por más de dos años de persecución”, agregó.
El narco uruguayo aseguró que “ella no tiene cargos que asumir” y que “hay varios procesados “sin haber cometido delito” alguno.
“Ella decidió irse a entregar a España a resolver su problema. La policía no hizo nada”, aseguró.
La detenida se enfrenta a una pena máxima de prisión de 22 años y seis meses en Paraguay, indicaron a EFE fuentes próximas a la investigación.
La esposa de Marset fue detenida en el aeropuerto de Madrid la semana pasada.
La justicia paraguaya le acusa de obtener ganancias del tráfico internacional de estupefacientes, constituir con esas ganancias una sociedad y abrir una cuenta bancaria para poner así en circulación el dinero ilícito en su sistema financiero.
Según informó la Dirección General de la Policía tras su detención, se encontraba fugada en Dubái y, fruto de la colaboración internacional, los agentes de la Sección de Localización de Fugitivos y de la oficina de la Interpol de Uruguay tuvieron conocimiento de que planeaba viajar a Madrid.
Tras comprobar que la orden internacional de detención seguía vigente, los agentes establecieron un dispositivo que culminó con su arresto nada más aterrizar en el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas.
La sospechosa supuestamente forma parte del Primer Cartel Uruguayo, la banda liderada por su esposo, considerado uno de los narcotraficantes más poderosos de Uruguay y el Cono Sur de América.
Un juez de la Audiencia Nacional española envió la semana pasada a prisión provisional a García Troche mientras se tramita la petición de entrega cursada por delitos de tráfico de drogas y blanqueo de capitales.