Recuperan cuatro cadáveres del yate de lujo hundido en Sicilia
El balance provisional es de cinco víctimas mortales, después de que poco después del desastre se encontrara el cuerpo sin vida de un cocinero
Cuatro cadáveres fueron recuperados este miércoles del interior del yate de lujo naufragado el lunes en Sicilia (sur), mientras prosigue la búsqueda de otros dos desaparecidos dentro de la nave hundida, confirmaron a EFE fuentes de los servicios de emergencia.
En un primer momento se recuperaron dos cadáveres del interior, uno de ellos el de un hombre "corpulento", y poco después se extrajeron otros dos.
Los cuatro cuerpos han sido trasladados al puerto de Porticello en barcos de los bomberos y de la Guardia Costera y se procederá ahora a su identificación.
Asimismo, las fuentes aseguran que dentro del velero hundido ya se ha localizado a una quinta víctima.
El velero 'Bayesian' se hundió en la noche del lunes frente a las costas de la localidad de Porticello en medio de una fuerte borrasca, cuando en su interior había 22 personas, 12 pasajeros y 10 miembros de la tripulación. De estos, 15 lograron salvar su vida.
El balance provisional es de cinco víctimas mortales, después de que poco después del desastre se encontrara el cadáver del cocinero Ricardo Tomas, canadiense nacido en la isla de Antigua.
Los seis desaparecidos son el magnate británico Mike Lynch y su hija Hannah, el presidente de Morgan Stanley International, Jonathan Bloomer, con su esposa, y el abogado de Lynch, Chris Morvillo, y su mujer Neda.
No obstante las autoridades todavía no han confirmado la identidad de las víctimas recuperadas.
Las labores de recuperación están siendo complicadas debido a la profundidad en la que se encuentra el yate, a 50 metros, y por la posición en la que quedó tras su hundimiento.
Los buzos de los bomberos italianos ayer consiguieron abrir una vía de acceso pero proceden lentamente porque solo disponen de una autonomía de doce minutos en cada inmersión, según explicaron los responsables del dispositivo.
Entretanto, la Fiscalía de Termini-Imerese ha abierto una investigación para esclarecer el desastre y hoy interrogó durante más de dos horas en un hotel de la zona al capitán del velero, James Catfield, neozelandés de 51 años y uno de los supervivientes.