Ser universitario duplica ingresos, según un estudio
Los que tienen título ganan 56% más frente a los que se quedaron en secundaria
Chile, Colombia y Costa Rica son los países de la OCDE en los que las personas con estudios universitarios presentan una mayor brecha de ingresos con el resto y los tres únicos en los que ganan más del doble de los que han llegado al nivel superior de secundaria.
En su informe anual sobre el panorama de la educación en sus miembros publicado recientemente, donde no figura Bolivia, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) explica que como media los que tienen un título universitario ganan un 56% más que los que se han quedado en el último curso de secundaria.
Sin embargo, las diferencias en el interior de la organización son muy notables, y la brecha llega a máximos en Chile (un 161% superior), Colombia (155%) y Costa Rica (102%).
De hecho, queda claro que en Latinoamérica la ventaja de haber ido a la universidad, es en términos generales, mayor que en buena parte del mundo desarrollado, ya que en Brasil –que no forma parte de la OCDE, pero que forma parte de este análisis para algunos parámetros– ese diferencial es también muy significativo, del 143%.
Esa brecha educativa se confirma también en el sentido opuesto, es decir, los que tienen un nivel de estudios que no llega al nivel superior de secundaria ganan como media un 18% que estos en el conjunto de la OCDE, y es mucho mayor en esos países latinoamericanos.
En concreto, alcanza el 24% en Costa Rica, el 25% en Brasil, el 30% en Colombia y hasta el 51% en Chile.
ESPAÑA ROZA LA MEDIA
España se sitúa ligeramente por debajo de la media de la OCDE. Los que tienen títulos superiores reciben ingresos que son un 51% superiores a los que se han quedado en el nivel superior de secundaria, y los que ni siquiera han llegado hasta allí están un 17% por debajo.
Los autores del estudio indican que entre los que han hecho estudios universitarios, ganan más todavía los que han hecho un máster o un doctorado.
También que la brecha de ingresos por los estudios tiende a hacerse mayor entre los trabajadores de mayor edad.
Es decir, que si las personas de entre 25 a 34 años que no han llegado al nivel superior de secundaria perciben un 15% menos que estos de la misma edad, en el grupo de 45 a 54 años esa diferencia pasa al 20%.
Lo mismo se percibe con los que tienen títulos universitarios: sus remuneraciones son un 39% más altas dentro del grupo de 25 a 34 años y un 68% para los de 45 a 54 años.
BOLIVIA
Si bien Bolivia no forma parte del informe de la OCDE como de ninguna medición internacional de la calidad educativa, se sabe, a partir de un estudio realizado por la Universidad Central (Unicen), que en el país cada año se titulan de las universidades públicas y privadas, un promedio de 41 mil nuevos profesionales, de los cuales solamente 10 mil consiguen empleo, lo que representa un 24,39 por ciento del total de egresados.
Brasil mejora sus indicadores educativos
Brasil ha mejorado todos sus indicadores educativos entre 2016 y 2023, pero sigue por debajo de la media de los indicadores de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), según un informe publicado por esta institución.
El informe “Panorama de la Educación 2024”, divulgado en París, reseña la mejoría de Brasil en varios indicadores de escolarización y de gasto público por estudiante a lo largo del tiempo del estudio.
En especial, la proporción de personas de entre 25-34 años sin estudios secundarios superiores se redujo en 8 puntos porcentuales entre 2016 y 2023, hasta un 27%.
Esta cifra, a pesar de representar una mejoría, se sitúa 13 puntos porcentuales por debajo de la media de los países de la OCDE, organización a la que Brasil aspira a unirse.
La OCDE advirtió de que las tasas de desempleo entre los trabajadores de esa edad que no tienen estudios superiores son diez puntos más altas que el de los universitarios.
En otro apartado del estudio, se indica que en Brasil el 90% de los niños pequeños están escolarizados, ligeramente por debajo de la media de la OCDE (96%).