El Papa aparece para la bendición Urbi et Orbi tras la misa del Domingo de Resurrección
El pontífice argentino permaneció sentado en la silla de ruedas, sin las cánulas nasales para el oxígeno, y deseó una “Buena Pascua” desde el balcón de la logia central de la basílica de San Pedro

El papa Francisco, aún convaleciente de su infección respiratoria, apareció en el balcón de la logia central de la basílica de San Pedro para la bendición Urbi et Orbi tras la misa del Domingo de Resurrección.
Francisco no ha participado en ninguno de los ritos de la Semana Santa debido a que sigue recuperándose tras haber pasado 38 días en el hospital por una neumonía bilateral y haber sido dado de alta el 23 de marzo.
El pontífice argentino permaneció sentado en la silla de ruedas, no llevaba las cánulas nasales para el oxígeno, deseó una "Buena Pascua" y pidió al maestro de ceremonias que leyese el mensaje de la Pascua ante las 35.000 personas congregadas en la plaza de San Pedro para la misa del Domingo de Resurrección, que fue oficiada por el cardenal Angelo Comastri.
Francisco había aparecido de nuevo por sorpresa este sábado cuando acudió a rezar a la basílica de San Pedro antes de la celebración de Vigilia del Sábado Santo y se detuvo a saludar a algunos grupos de peregrinos estadounidenses que estaban en esos momentos en el templo.
El Papa ha estado ausente en todos los ritos de la Semana Santa vaticana y sólo acudió en la tarde del Jueves Santo a la cárcel romana de Regina Coeli, cerca del Vaticano, para un saludo a los reclusos cómo había hecho desde el inicio del pontificado.
"La vivo como puedo", respondió el pontífice, con un hilo de voz, desde la ventanilla del coche a su salida de la prisión, preguntado por los medios sobre cómo vive esta Semana Santa en estos momentos delicados de su salud.