EEUU impone sanciones a Gustavo Petro por presuntos vínculos con el narcotráfico
La noticia de las sanciones se produce después de varios meses de tensión diplomática entre los gobiernos de Petro y Donald Trump
En una medida sin precedentes, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó este viernes al presidente de Colombia, Gustavo Petro, junto a varios miembros de su familia y su ministro del Interior, Armando Benedetti. Las sanciones, incluidas en la lista OFAC (Oficina de Control de Activos Extranjeros), apuntan a presuntos vínculos del presidente colombiano con el narcotráfico, una acusación que desató fuertes reacciones tanto en Colombia como en la comunidad internacional.
Según el Tesoro de EE.UU., Petro fue designado debido a su “rol en el tráfico ilícito de drogas”, citando el aumento en la producción de cocaína en Colombia desde su llegada al poder. El secretario del Tesoro, Scott Bessent, en un comunicado, señaló que “ajo la administración de Petro, la producción de cocaína en Colombia ha alcanzado cifras récord, inundando a Estados Unidos y envenenando a los estadounidenses”. Además, se le acusa de haber brindado beneficios a “organizaciones narcoterroristas”, entre ellas el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.
La noticia de las sanciones se produce después de varios meses de tensión diplomática entre los gobiernos de Petro y Donald Trump, quien fue un crítico constante de la política antidrogas de Colombia. La medida también llega tras una serie de comentarios duros de Trump, quien recientemente calificó a Petro como “líder del narcotráfico” y anunció la suspensión de pagos y subsidios a Colombia, una de las naciones más beneficiadas por la ayuda estadounidense en la lucha contra las drogas.
Reacciones del presidente Petro y su círculo cercano
El presidente Petro respondió rápidamente a las sanciones en su cuenta de X afirmando que había contratado al abogado estadounidense Dany Kovalik para defenderse de las acusaciones. “Luchar contra el narcotráfico durante décadas y hacerlo de manera efectiva me ha traído esta medida del gobierno de la misma sociedad que tanto ayudamos a reducir su consumo de cocaína”, escribió Petro, calificando las sanciones como una “paradoja”.
Asimismo, su hijo Nicolás Petro y su esposa Verónica Alcocer también fueron incluidos en la lista OFAC. Nicolás Petro, quien fue arrestado en 2023 por cargos de lavado de dinero y enriquecimiento ilícito, negó las acusaciones de vinculación con narcotraficantes. “Mi caso no tiene que ver con el narcotráfico ni con la campaña presidencial”, aseguró en una entrevista, tildando las sanciones de “persecución política”.
Por su parte, el ministro del Interior, Armando Benedetti, también reaccionó en X, señalando que nunca había tenido vínculos con narcotraficantes y denunciando la “farsa armamentista” de la lucha antidrogas de EE.UU.
“Para EE.UU., una declaración no violenta es lo mismo que ser narcotraficante”, escribió Benedetti, quien también acusó a ese país de intervenir injustamente en los asuntos internos de Colombia.
La ofensiva de EE.UU. y el contexto de la sanción
La sanción impuesta a Petro no es un hecho aislado, sino que forma parte de una creciente presión de Estados Unidos sobre Colombia por su gestión de la lucha contra el narcotráfico. Según informes de la ONU, la producción de cocaína en Colombia aumentó un 53% en 2023, alcanzando un récord histórico de 2.600 toneladas, aunque el gobierno colombiano defiende que las incautaciones de droga también han sido las más altas de la historia, con más de 1.700 toneladas decomisadas en lo que va de su mandato.
Sin embargo, el gobierno de Petro ha sido blanco de críticas tanto dentro como fuera de Colombia, especialmente por su acercamiento diplomático con el régimen de Maduro, un aliado clave de las organizaciones narcotraficantes en Venezuela.
La decisión de EE.UU. también ocurre en un momento en que la diplomacia entre los dos países está especialmente tensa. La relación entre Petro y Trump fue problemática desde el inicio del mandato del presidente colombiano, con críticas mutuas y desacuerdos sobre cómo abordar la crisis del narcotráfico. La sanción de este viernes es vista como un episodio más de esa confrontación, con la administración de Trump utilizando la guerra contra las drogas como una herramienta para presionar al gobierno colombiano.
Impacto y consecuencias para Colombia
Las sanciones impuestas a Gustavo Petro y su círculo cercano tienen importantes implicaciones para las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Colombia, especialmente en el contexto de la cooperación en materia de seguridad y narcotráfico. Las sanciones de la OFAC congelan cualquier activo que las personas designadas puedan tener en EE.UU. y prohíben a los ciudadanos estadounidenses hacer negocios con ellos. Además, la inclusión en la lista OFAC puede dificultar los viajes y las transacciones financieras internacionales de los sancionados.
Por otro lado, la medida también podría tener repercusiones internas en Colombia, donde algunos sectores políticos y sociales ya cuestionan la eficacia del gobierno de Petro en la lucha contra el narcotráfico. La administración de Petro defendió su enfoque, señalando que su lucha se ha centrado en desmantelar las redes de narcotráfico y reducir los eslabones de la cadena de producción y distribución, mientras que Estados Unidos se concentra más en la erradicación de cultivos y la detención de grandes narcotraficantes.