Ya se ven nuevos preparativos para llevar a la ciudadanía al voto, esta vez para la aprobación del Estatuto Autonómico de Chuquisaca, redactado de manera improvisada, sin estudios geopolíticos e históricos, ni conocimiento de los valores, derechos y privilegios de este núcleo de una República decapitada y, donde el tema relativo a Sucre Capital del Estado en un régimen de autonomías, tiene algunas singularidades, que los actuales líderes departamentales no valoraron.
El nuevo Comité Cívico “chuto” tiene entre otras tareas suicidas, facilitar el voto favorable a las consignas que salen del gobierno, olvidando que Sucre por la capitalidad, ha pagado un alto precio, no solo en vidas chuquisaqueñas truncadas, ver la lista en el monumento a los mártires de Cosmini y Ayo Ayo (Cementerio de Sucre) otros, y los últimos de La Calancha; además, la pérdida de un extenso territorio de 138.000 Kms2 a 51.000, hoy en manos de conquistadores criollos externos e internos.
Los chuquisaqueños del presente, deben conocer que el Chaco, desde El Mutún a Villamontes y hasta el Rio Paraguay eran nuestros, y por tanto la orilla Norte del Pilcomayo, que en la actualidad pertenece a otro departamento y, nos excluye gradualmente de gravitar en la Cuenca del Plata.
El capítulo de Ubicación, Sede, Símbolos e idiomas del Estatuto Autonómico de Chuquisaca, ubica a este departamento al Sudeste de Bolivia y nada más. Olvida, y pasa por alto sus derechos territoriales originales; da por resueltos los problemas limítrofes provisionales, y considera definitivo el Mapa de Bolivia actualmente vigente e inconstitucional, con muchas deficiencias que perjudican intereses de varias regiones, siendo por tanto, una Carta Preliminar. Estos temas de fondo, deberían ser tratados en la Asamblea Plurinacional con prioridad.
Asimismo, se afirma que Sucre es la Capital del Estado Plurinacional y capital del departamento de Chuquisaca; un tema que debería ser tratado con mayor rigor; porque la Capital al ser la ciudad más importante de un país, debe tener definidas sus áreas, roles, funciones y recursos a través de una Ley Nacional Especial que defina esos aspectos. Sucre Capital, que cuenta con la mayor parte de la población departamental, votara la aprobación de un Estatuto que muestra una completa ignorancia de su valía.
Este problema es de responsabilidad directa de la Gobernación, la municipalidad y el Comité Cívico que no se atrevieron a defender oportunamente los intereses de la región y la capital, por ignorancia y componendas políticas que salen a luz con premios a la obsecuencia resultado de las pasadas elecciones.
Finalmente, mantener las viejas heridas sangrantes, las conciencias usurpadoras que pican, y, los intereses politiqueros que se alimentan al dispersar, son factores que impiden unir esfuerzos y voluntades para beneficio colectivo a través de un nuevo y poderoso Bloque del Sur. Es estratégico e inteligente, buscar la unidad del Sur a pesar de todo, por las fortalezas que pueden traducirse en un mejoramiento de la situación general, renunciando al pasado y uniendo iniciativas y potenciales, bajo el lema de “la unión hace la fuerza”. Los ejemplos de ayer en La Calancha y de hoy en Potosí, muestran ese camino de defensa frente a la exclusión, la soledad y el abandono.