El derecho al agua

09/11/2016
PUBLICITE AQUÍ

La Constitución consagra como un derecho fundamental el derecho al agua y a la alimentación. Art. 16–I: “Toda persona tiene derecho al agua y a la alimentación”. Art 20.- I: “Toda persona tiene derecho al acceso universal y equitativo a los servicios básicos de agua potable, alcantarillado, electricidad, gas domiciliario. II. Es responsabilidad del Estado en todos sus niveles la provisión de los servicios básicos a través de entidades públicas, mixtas, cooperativas y comunitarias. III.- El acceso al agua y alcantarillado constituyen derechos humanos, no son objeto de concesión ni privatización”. Finalmente, la Constitución claramente señala: “La provisión de servicios debe responder a los criterios de universalidad, responsabilidad, accesibilidad, continuidad, calidad, eficiencia, eficacia, tarifas equitativas y cobertura necesaria con participación y control social”.

Estos días que estamos pasando una grave crisis por falta de agua en la ciudad, corresponde pues que todos los ciudadanos tengamos clara conciencia de la importancia y vital urgencia de contar en la ciudad Capital de Bolivia, cuando menos, con adecuados servicios básicos, y uno de ellos, el más importante porque es fuente de vida, es el agua.

¿Cuantos años han pasado desde la última ampliación de la red de agua y alcantarillado? ¿Cuánto ha crecido la ciudad en estos años? Y paralelamente a esto, la cobertura de servicios básicos: agua, luz, alcantarillado, comunicaciones, etc., etc., ¿han estado al ritmo del crecimiento de la ciudad? Esta ciudad ha crecido, se ha extendido, pero no hay desarrollo, porque un indicador del desarrollo es pues que todos los habitantes tengan servicios múltiples y buenos; en Sucre ni siquiera los servicios básicos tenemos. En el caso del agua que nos atinge, con un sistema de aducción desde hace cerca de un siglo atrás, un verdadero milagro de la ingeniería de la Empresa Linares-Álvarez en su tiempo, para dotar de agua a Sucre mediante un canal de muchos kilómetros, obra humana que hasta aquí ya ha superado su tiempo de vida útil. Sin embargo, sigue sirviendo para traernos el agua, la vida desde vertientes que no son, precisamente, de nuestro departamento.

¿Qué se ha hecho para encontrar vertientes y fuentes del departamento y cercanas a Sucre y proveernos en cantidad suficiente desde estas fuentes de agua? ¿Qué exploración de vertientes de agua ha financiado la Empresa Local de Aguas para solucionar este problema del líquido elemento en Sucre? Por supuesto, la respuesta es nada. La empresa, que despliega gran publicidad para el cumplimiento del pago de tarifas, es apenas una empresa de administración de la distribución de este “vital elemento” que no produce, pero cuya sección más importante de funcionamiento son sus cajas para el cobro de tarifas, como sucede con otras empresas de servicios de las que en su momento nos ocuparemos. Sin embargo, sobre las unidades técnicas de la aducción, tratamiento y otros procesos del agua, parece ser que la empresa no tiene mayor preocupación.

La verdad es que los ciudadanos deberíamos estar agradecidos a aquellos “peones” de última línea y nivel del canal Ravelo que, en las peores condiciones de trabajo, son quienes posibilitan que tengamos agua en nuestros hogares. Pero cuando no hay lluvias y la madre naturaleza, por lo que la han maltratado los mismos humanos, ha cambiado sus ciclos y estaciones, los habitantes de la capital del Estado Plurinacional estamos expuestos a pasar las peores angustias, como las que están sufriendo quienes viven en zonas altas y, finalmente, todos, porque para todos es el agua y debiera haber en abundancia y gratuita.

Compartir:
Más artículos del autor


Lo más leido

1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
Suplementos


    ECOS


    Péndulo Político


    Mi Doctor