Con penales cobrados por el VAR, Manchester United y Oporto clasificaron a los cuartos de final de la Liga de Campeones y dejaron en el camino al PSG y a la Roma, respectivamente.
El París Saint-Germain vive atormentado en la Liga de Campeones y ayer firmó un nuevo fracaso en octavos de final contra el Manchester United, que despertó los fantasmas del equipo francés para acceder a los cuartos de final.
El proyecto catarí de las riberas del Sena naufragó en octavos de final, como cuando la remontada del Barcelona o el año pasado, frente al Real Madrid.
De nuevo lo hizo cuando lo tenía todo de cara, un resultado favorable cosechado en Old Trafford (0-2) que se convirtió en cenizas cuando en el descuento, ayudado por el VAR, el colegiado señaló un penal que dejó en tierra al Parque de los Príncipes (1-3).
El Oporto, por su parte, superó a la Roma en una eliminatoria dramática que se decidió en la prórroga (3-1), con un gol de penal revisado por el VAR en el minuto 117.
Los “Dragones” se llevaron la clasificación en un partido lleno de nervios en el que salieron a ganar ante una Roma que, aunque consiguió ser superior en algunas fases del partido, se agarró demasiado a la ventaja conseguida en la ida (2-1).
Manchester y Oporto se suman a Tottenham y al Ajax, que el martes despacharon al Borrusia Dortmund y al campeón vigente Real Madrid, respectivamente.
La otra semana jugarán Juventus-Atlético de Madrid, Manchester City-Schalke 04, Barcelona-Lyon y Bayern Múnich-Liverpool.