Cuando creíamos que los holocaustos habían desaparecido…
Cuando suponíamos que la pandemia los había transformado en mejores humanos…
Cuando sobrevivimos a tantas batallas desiguales, en las que nos enfrentamos a innumerables traiciones y desamores… desde la Alcaldía recibimos la peor puñalada.
Pues en nombre de la falsa solidaridad humana…
De solucionar la sobrepoblación canina en las calles…
De brindarnos una vida placentera hasta el final de nuestros días...
De no vernos más en los basurales buscando comida y quedarnos a morir pasivos ante el abandono de nuestros amos…
¡¡¡Están creando un centro de extermino canino en Puca Puca!!!
Ante la indiferencia de nuestros amos, nos atraparán para llevarnos hasta ese lugar, a 40 kilómetros de Sucre, donde ni siquiera hay camino cuando llega el río, probablemente para no tener testigos sobre este nuevo holocausto.
No hay agua, tampoco comida. Dicen que cuando nos toque comer, llevarán los desperdicios que aporten los restaurantes.
Ummm, lo tienen todo bien calculado: ¡moriremos de hambre y de sed!
¿Si irán a rescatarnos los amos? Por supuesto que no. Ni se percatarán de nuestra ausencia, como siempre.
¿Si pagaran la multa por nosotros? Por supuesto que no. A cambio llevarán otro cachorro a sus casas y lo mimarán como alguna vez lo hicieron con nosotros, aunque tristemente también acabarán abandonados en la calle.
¡¡¡Puca Puca no es la solución!!! ¡¡¡Deben esterilizarnos y vacunarnos!!!
Sancionen a los amos irresponsables que se burlan de las leyes y de nosotros, a pesar de haberles dedicado la vida entera aunque no lo merezcan.
San Roque, haz que ya no mientan más, haz que desaparezca ese horroroso lugar… no pedimos venir a este mundo a sufrir, pero sí tenemos derecho a vivir...
