Es tan importante esta nota que se la transcribe literalmente con la esperanza de que los lectores y, especialmente, las autoridades vinculadas con el patrimonio de la ciudad, se den un tiempo para leerla y actuar en consecuencia, precisamente en este momento en que la reacción general en contra de construcciones fuera de norma ha crecido en tal forma, que tiene que terminar en una acción eficaz para evitar que se pierda no solamente el título patrimonial, sino el patrimonio mismo, lo que sería una aberración porque se perdería la fortaleza que tiene la ciudad para generar los recursos económicos provenientes del turismo que precisa la gente para vivir.
El 26 de septiembre de 2023, National Geographic seleccionó tres ciudades latinoamericanas, entre ellas Sucre, al considerarlas “las más históricas del mundo”, incluidas por la Unesco en la “Lista del Patrimonio Mundial”.
Los tres destinos elegidos son Sucre, Bolivia; Lima, Perú; y Colonia del Sacramento, Uruguay, las que se identificaron, según National Geographic, “por ser reconocidas como un ejemplo destacado de un tipo de edificación, conjunto arquitectónico o tecnológico o paisaje que ilustra una etapa significativa de la historia de la humanidad”.
Respecto a Sucre (se respeta el texto publicado por National Geographic) se señala lo siguiente: “Sucre, ubicada en el centro-sur de Bolivia, es una de las ciudades seleccionadas por su arquitectura, la cual muestra estilos locales y también europeos. Como se sabe, este lugar fue fundado por los españoles en el siglo XVI, pero en 1839 fue declarado como la primera capital del país. La riqueza minera de Potosí influyó en el desarrollo económico de Sucre. Asimismo, sus edificaciones, como las iglesias, llaman la atención por la mezcla de estilos y tradiciones de la época renacentista, mudéjar, gótico, barroco y neoclásico, entre los siglos XVI y XIX”.
“La Casa de la Libertad, construida en 1621 como parte del Convento de los Jesuitas, se encuentra también en esta ciudad y es considerada un monumento histórico del país por lo acontecido antes de la independencia”.
“Sin lugar a dudas, una nueva distinción que nos llena de orgullo y compromiso, resaltando la belleza y riqueza patrimonial de esta maravillosa ciudad”.
“Que te cuente no es suficiente. Conoce y visita Sucre, Capital de Bolivia, una ciudad que es una locura”.
Hasta ahí, la transcripción. No es extraño ni es la primera vez que gente que no es de Sucre opine así de esta antigua y vieja villa, en contraste con la opinión y la actitud de muchos de nuestros propios ciudadanos, que no aceptan aprovechar nuestro pasado para incentivar el turismo, fuente inagotable de recursos de beneficio colectivo y generador de empleo, que es lo que más necesita la región.