El apagón eléctrico de Chile y el apagón de España marcarán un antes y un después en la historia contemporánea de la industria eléctrica.
Los ‘haters’ me siguen tratando de ofender en mi cuenta de X e Instagram en relación a mis declaraciones a medios especializados en donde afirmo que el socialismo es culpable de la debacle eléctrica española. Me ratifico: es la mala gestión. Y la pésima visión del socialismo de Sánchez Castejón que llevaron a España a ese nivel de incertidumbre. El no permitir más inversiones en gas, el no permitir más inversiones en generación nuclear, y apegarse a una narrativa ultraverde fundamentalista evitaron construir un mix energético que sea adecuado y confiable. Me gustaría que los socialistas tengan mismo nivel de intolerancia contra China comunista.
Explicaciones puede haber muchas y desde todo ángulo. La más plausible es que no podemos abandonar el uso de gas natural y generación nuclear y dar rienda suelta a caprichos de los ultra fundamentalistas verdes. Y otra constatación: las renovables si son y serán importantes en la medida en que logremos reducir costes tecnológicos de generación y almacenamiento. Y en la medida en que permitamos que un mix funcional sea el responsable de suministrar electricidad a nuestras ciudades e industrias.
Ante ese escenario volvemos a insistir en el hidrógeno, un nuevo “actor” de la energía que viene a sentar presencia en los próximos años. Ya tenemos establecido que el hidrógeno se utiliza para transporte, industria pesada y la generación de energía, ampliando su relevancia en la transición energética.
Hablemos, de nuevo, del hidrógeno, como en anteriores columnas de análisis: se estima que el mercado del hidrógeno superó los 204.500 millones de dólares en 2024 y se proyecta un crecimiento anual del 12,2% hasta 2032 (ver: Global Market Insights Inc.). Es una verdad de Perogrullo que habrá producción de hidrógeno –mediante electrólisis con energías renovables como solar, eólica e hidro– en regiones con abundantes recursos renovables (ver: Foro Económico Mundial).
Actualmente se están construyendo plantas de producción, estaciones de recarga y redes de transporte. Algunos ejemplos concretos: planta de hidrógeno verde de Ecopetrol en Colombia (Cartagena) con una producción anual de 800 toneladas, siendo la más grande de América Latina (ver: Reuters).
El principal enfoque para el hidrógeno podría ser en la movilidad sostenible: de manera que el hidrógeno se posicione como alternativa en el transporte pesado y de larga distancia, enfocándose en su alta autonomía y rápida recarga: cito como ejemplo a Vehículos como el autobús Irizar i6s Efficient Hidrógeno ofrecen hasta 900 km de autonomía y tiempos de recarga inferiores a 20 minutos (ver Cadena SER). Ello contribuye a que estos vehículos tengan cero emisiones. Adicionalmente a Colombia, reiteramos que Chile lidera una estrategia Nacional de Hidrógeno Verde, buscando alcanzar 5 GW de capacidad de electrólisis para 2025 y 25 GW para 2030 (Ver: Reuters).
Sin embargo todavía hay desafíos que deben ser enfrentados y superados con tecnología e inversiones: como reducir costes de producción y distribución; incentivar construcción de infraestructura crítica limitada y continuar investigando y desarrollando modelos de uso comercial del hidrógeno que lo hagan rentable y que, adicionalmente, implique que no hayan pérdidas energéticas tanto en su producción, almacenamiento y transporte del hidrógeno implican pérdidas energéticas significativas (para profundizar, ver: Indepaz).
En todo caso, el gran mensaje es: el mundo necesita energía de donde venga. Todas las fuentes son bienvenidas, obviamente el carbón es el más contaminante y debe dejar de utilizarse; el petróleo –como ya tenemos establecido– no dejará de ser utilizado al menos en esta generación y el gas natural es puente de transición y respaldo a la generación eléctrica renovable solar y eólica. No vale ser ultraverde fundamentalista porque no podemos jugar a una sola carta. El desarrollo de la sociedad y la economía exigen energía 24/7 y tenemos la oportunidad y obligación de estimular inversiones en tecnología y en generación con responsabilidad.
* X @borissgomezu / Instagram @borissantosgomezuzqueda