97 ministros pasaron por el gabinete
Desde 2006 se mantienen en sus cargos, el ministro de Economía, Luis Arce, y el de Relaciones Exteriores, David Choquehuanca

Este 22 de enero, Evo Morales cumplirá diez años en la Presidencia de Bolivia. A lo largo de su gobierno, un total de 97 hombres y mujeres pasaron por su gabinete ministerial, de éstos sólo 34 (35%) fueron mujeres, mientras que el otro 65% estuvo copado por varones, de acuerdo con un recuento realizado por ANF.
Sólo en los gabinetes de 2010 y 2011, el Jefe de Estado logró el 50% de mujeres y el 50% de hombres en la composición de su gabinete, no obstante la presencia de la mujer fue en disminución desde 2012, llegando a 2015 a un 29% con la salida de Nemesia Achacollo del Ministerio de Desarrollo Rural, quien fue reemplazada por el ex gobernador de La Paz César Cocarico.
Desde 2006 se mantienen en el cargo, sin cambio alguno, el ministro de Economía, Luis Arce, y el canciller David Choquehuanca. Sin embargo, no existe una mujer que haya estado en los diez gabinetes de Evo Morales de manera continua, aunque hubo al menos cuatro ex ministras que estuvieron entre cuatro y seis años como estrechas colaboradoras del Jefe de Estado.
Nardi Suxo fue la mujer que más tiempo estuvo como ministra, con seis años al frente de la cartera de Transparencia, desde su creación en 2009 hasta 2015.
Con cinco años y siete meses, Nemesia Achacollo es la segunda mujer que más tiempo acompañó a Morales desde el Ministerio de Desarrollo Rural, hasta su salida, el 31 de agosto de 2015, por el escándalo del Fondo Indígena. La dirigente indígena nacida en Yapacaní (Santa Cruz), estuvo al frente del Ministerio desde enero de 2010.
Por último, Viviana Caro, en el Ministerio de Planificación, y Ana Teresa Morales, en la cartera de Desarrollo Productivo, con cinco y cuatro años respectivamente, completan la lista de las mujeres que destacaron por su permanencia en el gabinete de Morales. La primera estuvo desde 2010 a 2015 y la segunda de 2011 a 2015.
97 MINISTROS
El primer gabinete de Morales de 2006 estuvo compuesto por 16 ministros. Sólo cuatro eran mujeres (Celinda Sosa de Desarrollo Económico, Nila Heredia de Salud, Casimira Rodríguez de Justicia y Alicia Muñoz de Gobierno). Los otros 12 eran varones. En 2007 se mantuvo el número de carteras, al igual que la presencia femenina, salvo algunos cambios de nombres, entre ellas el ingreso de Susana Rivero y Celima Torrico en Desarrollo Productivo y Justicia, respectivamente. El gabinete se elevó a 18 miembros en 2008. Nacieron los Ministerios de Desarrollo Rural y Defensa Legal del Estado con Carlos Romero y Héctor Arce al frente de ambos como novedades. En 2009 se crearon los Ministerios de Culturas, de Autonomías y de Transparencia y se disolvió la cartera de Desarrollo Económico y Microempresa. Las figuras de Nardy Suxo y Pablo Groux aparecieron en el gabinete que ya tenía 20 ministros. En 2010 se mantuvieron los 20 ministerios, con la salvedad de que desapareció el Ministerio de Defensa Legal y se creó el de Comunicación a la cabeza de Iván Canelas. Ese año, además, se gestó uno de los episodios más curiosos dentro del gabinete. Milton Gómez Mamani estuvo como ministro de Minería por cinco días y fue reemplazado por José Pimentel tras conocerse que tenía demandas por un supuesto desfalco cometido cuando tenía responsabilidad directiva en la Caja Nacional de Salud.
Entre 2011 y 2013 se mantuvo la distribución ministerial. Nombres más y nombres menos caracterizaron el gabinete. En 2014 nació el vigésimo primer ministerio: la cartera de Deportes a la cabeza del ex futbolista Tito Montaño. En 2015 el número se mantuvo en 21, aunque con algunos cambios de nombres.
Cambiaron los ministros, ¿cambió Evo?
Tras los diez años cumplidos por el presidente Evo Morales en el gobierno, sus ex aliados y los actuales seguidores hacen una evaluación sobre si el líder del Movimiento Al Socialismo (MAS) cambió en esa década. Unos coinciden en que el Mandatario sigue siendo el mismo; sin embargo, otros creen que el carácter e incluso la forma de ser, hablar y vestir de Morales cambiaron.
Uno de los fundadores del MAS y actual opositor a Morales, Román Loayza, considera que Morales cambió en la forma de trato a los indígenas e incluso en su imagen. “El Presidente no es el mismo que antes”, dice.
Loayza comenta que antes el Presidente de Estado era mucho más humano y sentía un cariño especial por el movimiento indígena. Ahora, dice el líder campesino, está marcado por la represión a los indígenas y la persecución a sus críticos.
“Evo prometió no hacer correr sangre ni tampoco reprimir al pueblo, es lo primero que hizo”, dice el fundador del MAS. Acota que Evo cambió tanto que ahora gobierna “bajo una dictadura sindical y el totalirismo”.
“Caudillo político”, es otro de los términos que utiliza Loayza para referirse al Presidente.
Otro dirigente indígena que lo conoció desde la dirigencia sindical fue Felipe Quispe “El Mallku”. Recuerda que lo vio por primera vez en 1978.
Quispe reprocha que incluso el actual Presidente haya cambiado hasta la forma de vestir, por cambiar las abarcas, el poncho, la chamarra por los trajes con símbolos originarios. En 2005, Morales acostumbraba vestir una chompa con los colores, rojo blanco y azul.
“El Evo ha cambiado mucho, hubo gente que lo endiosó y la masacre de Caranavi (La Paz) y la represión a Chaparina ( a los indígenas del Tipnis) prácticamente lo alejó del pueblo (…) ahora una chaqueta colonial, un invento, una copia de Pedro Domingo Murillo o Sebastián Segurola, no es originaria”, detalla.
Para Quispe, el discurso del Mandatario antes era anticapitalista y antiimperialista, “pero ahora no dice nada”.
Sin embargo, estos criterios no son compartidos por quienes se encuentran en las filas del oficialismo. El ex presidente de la Cámara de Diputados y ex gobernador de Cochabamba, Edmundo Novillo, considera que esos argumentos son “absurdos”.
Novillo indica que las trasformaciones en lo político, económico y social son mucho más importantes que la imagen del presidente Morales. Asimismo, asegura que el Presidente no cambió de discurso y que sigue siendo anticolonialista y antiimperial.