Consumo de drogas inicia más temprano
El alcohol y el cigarro son las drogas de mayor consumo en el país. El hecho de que sean de consumo legal en adultos, hace que su control en menores de edad sea más difícil
Cada vez más jóvenes comienzan a consumir drogas en Bolivia. En promedio, según datos actuales, se estima que el consumo de alcohol y cigarrillo comienza desde los 11 y 12 años de edad, una edad que proyecta que en los próximos años el consumo de esas sustancias será un problema importante en los municipios.
Hasta hace algunos años se estimaba que la edad para iniciar en el consumo de drogas era de unos 15 a 16 años, pero según estadísticas de las últimas gestiones, se evidenció que la edad de comienzo de ese tipo de consumo es a partir de los 11, informa el jefe de la Unidad de Prevención Holística del Viceministerio de Defensa Social del Ministerio de Gobierno, Jorge Rodríguez.
“Si no tomamos medidas en los gobiernos municipales, departamentales y otros, en el futuro se volverá incontrolable”, advierte.
Sin embargo, más allá de esos datos, las estadísticas en el país son muy limitadas respecto al consumo de drogas, por lo que se está trabajando en la implementación de un sistema de alerta temprana de prevención de drogas en siete ciudades capitales del país, entre ellas, Sucre.
El sistema contará con dos módulos, uno de registro y otro de reportes, y será administrado por el Gobierno Municipal.
“El sistema servirá para que con la información puedan implementar en futuro, programas y proyectos para prevenir el consumo de drogas”, comenta Rodríguez al explicar que de manera paralela se trabaja en siete departamentos para la conformación de Comités Departamentales de Prevención y Tratamiento de Consumo de Drogas.
En Chuquisaca, esta labor actualmente se coordina con las instancias del nivel central y su implementación se desarrollará durante este mes, al igual que la implementación del sistema anunciado.
Posteriormente, el proyecto tendrá presencia en las nueve ciudades capitales y El Alto, anuncia Rodríguez.
ALCOHOL, EL PRINCIPAL PROBLEMA
El consumo de alcohol es la principal preocupación para las autoridades, ya que es la droga de mayor consumo en el país. Un 70% de la población boliviana consume alcohol, de acuerdo con estudios realizados en los hogares, unidades educativas y universidades.
Si bien el alcohol es una droga legal, su venta en cualquier tienda del país dificulta el control de su consumo en menores de edad, reconoce Rodríguez.
Después del alcohol, el cigarro es la segunda droga de mayor consumo en Bolivia. ¿Lo positivo? que el consumo de drogas ilegales –aunque presente– es relativamente bajo, ya que se estima que el 1% de la población las ingiere.
Sin embargo, su consumo en unidades educativas es cada vez más frecuente. En agosto pasado, tres estudiantes de colegio en Sucre fueron descubiertos con marihuana en sus mochilas.
A principios de octubre, en Sucre, un microtraficante de marihuana fue sorprendido en posesión de la droga en su mochila. A sus 20 años de edad, el joven tuvo que ser investigado.
A nivel nacional, varios traficantes se hacen pasar por vendedores de helados o de anticuchos para comercializar la droga incluso a plena luz del día, según las declaraciones del director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), Santiago Delgadillo, a la Agencia de Noticias Fides.
En medio de toda esta problemática, el Viceministerio de Defensa Social se impuso la meta de lograr reducir la demanda de drogas en al menos un 5% hasta 2020.
Rodríguez indica que de acuerdo con la información que recibió de distintas instancias que le piden realizar proyectos y talleres, el consumo de drogas en Sucre en las unidades educativas no es un desconocido entre los docentes, que piden acciones, para lo que esperan ayude pronto los informes que tengan del sistema que instalarán.
“No es conveniente hacer acciones aisladas, nos interesa tener información y que coordinemos con los gobiernos municipales y departamentales”, asegura.
Mientras tanto, en Sucre se implementa un programa de capacitación a jóvenes de unidades educativas, destaca la responsable del Programa de Prevención Contra el Consumo de Alcohol y Drogas de la Alcaldía, María Oporto. Este año, se llegó a 23 unidades educativas de la ciudad.
La meta de Oporto es llegar el próximo año a otros 50 colegios y para 2020 lograr intervenir todas las unidades del área urbana y rural.