La obra de Nazaria Ignacia también está reflejada en Sucre
La beata Nazaria Ignacia, que será canonizada en octubre de este año, caminó por las calles de la Capital en torno a una misión evangelizadora, dejando así un importante legado de lucha, espiritualidad y amor...
La beata Nazaria Ignacia, que será canonizada en octubre de este año, caminó por las calles de la Capital en torno a una misión evangelizadora, dejando así un importante legado de lucha, espiritualidad y amor a la iglesia. Su congregación erigió lo que hoy se conoce como la residencia Regina.
El 3 de marzo de 1935, la hermana Nazaria llegó a suelo chuquisaqueño, en respuesta a una invitación del arzobispo Francisco Pierini con el objetivo de organizar y llevar adelante una serie de actividades evangelizadoras en la ciudad.
Según la hermana Andrea Maraz, Nazaria, en compañía de cuatro hermanas prolongó su estadía por 15 días, tiempo en el que visitaron varias parroquias entre ellas: San Miguel y Santa Mónica, dieron catequesis en quechua a grupos parroquiales, empleadas domésticas y otros segmentos de la sociedad, organizaron también procesiones a la Catedral con los grupos parroquiales.
“Cuánto he gozado en estos viajes a Sucre, es para mí la Capital de Bolivia, uno de los sitios en que me he encontrado siempre más a gusto, mejor comprendida. ¡Hay tantas buenas cabezas como almas!”, escribiría después Nazaria en su diario.
En 1968, la congregación se estableció en la Capital con la compra de una vivienda que se encuentra en la calle Bustillos entre Colón y Dalence. Ahí las misioneras y seguidoras de la beata establecieron una residencia para universitarias que inicialmente recibió alrededor de 100 muchachas.
Actualmente las hermanas brindan el mismo servicio. Habilitaron 26 habitaciones en el internado Regina, que alberga a jóvenes que llegan en su mayoría del interior del Departamento para recibir formación universitaria.
La congregación también tiene a su cargo la librería que oferta a la población una diversidad de material bíblico.
ENTRONIZADA EN LA IGLESIA DE SANTO DOMINGO
El vicario de la Pastoral de la Arquidiócesis de Sucre, padre Enrique Quiroga, señaló que desde septiembre del año pasado la imagen de la beata Nazaria Ignacia está entronizada para su devoción, en la iglesia de Santo Domingo.
“Nosotros ya nos habíamos adelantado de alguna manera a la experiencia de tenerla como Santa y de invocarla, es un modelo para la misión en Bolivia”, dijo.
Detalló que se organizó una ceremonia con la presencia de las religiosas para entronizar la imagen de Nazaria “a quien desde entonces se la está rezando”.
“Este tiempo en que el papa Francisco nos recuerda que la vocación del cristiano es salir a las calles, salir a las periferias, creo que Nazaria Ignacia March hace mucho tiempo ya lo había hecho, por eso se convierte en un modelo para los jóvenes, en un desafío para aquellos que no quieren arriesgarse, vale la pena arriesgarse con Dios, cruzar las fronteras”, agregó el Vicario.
¿CUÁL FUE EL MILAGRO?
El milagro por el que este año Nazaria Ignacia será declarada Santa en octubre sucedió en Cochabamba, en 2010.
Elizabeth Copa, hermana de la congregación Misioneras Cruzadas de la Iglesia, relató a CORREO DEL SUR cómo vivieron el hecho que después sería calificado de milagroso, pues este se produjo en la misma comunidad que fundó la por ahora beata.
Corría agosto de 2010 cuando una de esas tardes Victoria Azuara, otra hermana que dedicó gran parte de su vida a escribir sobre la beata, cayó enferma durante su estadía en La Paz.
“Repentinamente empezó a dar señales de incongruencia al expresarse, cuando le consultamos cómo se sentía decía que sólo tenía un leve dolor de cabeza, la dejamos descansar pero dos horas después notamos que la situación empeoraba, por lo que decidimos trasladarla a un centro hospitalario, donde le detectaron derrame cerebral”, contó.
Por el delicado estado de salud, Azuara fue trasladada a la ciudad de Cochabamba. Fue internada en la clínica Los Olivos, un jueves, con el diagnóstico de derrame cerebral o ataque cerebrovascular (ACV).
La comunidad fue anoticiada sobre la situación y en todas las casas comenzaron a rezar una novena, además de pedir que Nazaria Ignacia interceda por la recuperación de una de sus más dedicadas seguidoras.
Cuatro días después de su internación y sin necesidad de intervención quirúrgica la hermana tuvo una notable mejoría, tanto así que el personal médico de la clínica, aún sin comprender lo sucedido, le otorgó el alta médica
Tras ese episodio, la hermana Azuara retornó a España, su país de origen, donde también se sometió a otros exámenes clínicos. Los galenos concluyeron que según los estudios, la hermana debía estar postrada en cama a causa del derrame cerebral diagnosticado. Sin embargo, a pesar de sus años, Azuara sorprendía a los médicos con su lucidez. En busca de una respuesta científica fue sometida a una serie de estudios médicos que no develaron nada, pues los galenos no encontraron explicación objetiva.
El milagro se había dado.
El INICIO
Tras varias consideraciones, en 2013, la congregación decidió adjuntar la documentación para remitirla a Roma y en mayo de 2015 se abrió el proceso para la canonización de Nazaria, se conformó un tribunal evaluador y en octubre de ese año finalmente se envió la documentación a la capital de la Iglesia Católica.
“Nos sorprende lo rápido que pasó esto”, dijo Elizabeth Copa, que a su vez anunció que la canonización a la beata será el décimo mes del año en Roma, donde también se realizará un Sínodo Mundial de Obispos.
Adelantó que después de la reunión de Cardenales en Bolivia comunicarán el día exacto de la canonización.
DE BOLIVIA, A ESPAÑA Y AL MUNDO
La congregación de las Misioneras Cruzadas de la Iglesia nació en Oruro y desde allí se extendió a otros países. Actualmente la comunidad que fundó Nazaria Ignacia tiene presencia en cuatro continentes y 21 países. La labor de las hermanas es predicar el evangelio y “bajar a la calle”.
Al ser Oruro el lugar donde nació el camino de las misioneras, madre Nazaria, amó con especial cariño a esas tierras.
“Uru Uru, donde nació nuestra congregación, donde nació la luz para el mundo”, afirmaba la beata, según lo indican las hermanas.
UN POCO DE HISTORIA
Nazaria llegó a Oruro en 1912 con la congregación de las “Hermanas de los Ancianos Desamparados”, el afán e interés de extender la prédica a otros ámbitos le llevó a solicitar permiso para iniciar con catequesis y prédicas en las calles.
En 1920 durante una visita al beaterio de Jesús Nazareno en la capital orureña sintió un acercamiento con lo que sería la casa cuna de la congregación. En uno de sus escritos narró que al ingresar a dicho templo escucha que Jesús Nazareno le dijo “ésta será tu primera casa y tu primer convento”.
Sin embargo, fue en 1925 cuando las autoridades religiosas de ese entonces le otorgaron un permiso de seis meses para reformar el Beaterio de Nazareno.
Antes del plazo establecido, Nazaria contaba con nueve compañeras que se unieron a su labor y posteriormente la acompañaron en la fundación de la congregación con el nombre inicial de las Misioneras de la Cruzada Pontificia (MCP), el 16 de junio de 1925.
La beata falleció el 6 de julio de 1943 en Buenos Aires (Argentina). En 1972 trasladaron sus restos a Oruro, para cumplir su último deseo, descansar en la casa cuna de la congregación.
Todos estos antecedentes están plasmados en el libro de Javier Baptista, titulado “Nazaria Ignacia, mujer de ayer y hoy”.
CASAS EN BOLIVIA
Después de la fundación en Oruro, la congregación se extendió a Cochabamba en 1927, La Paz (1928), Potosí (1929) y Santa Cruz (1930). Nazaria inició después viajes a otros países, entre ellos: Argentina, Uruguay y España donde también dejó la semilla para la conformación de más congregaciones.
Las misioneras cruzadas de la iglesia sentaron presencia con 15 casas en el país que se encuentra en todos los departamentos excepto Tarija. Cuentan con cinco casas en Cochabamba, dos en Santa Cruz, una casa en Potosí, Sucre, La Paz, El Alto, Beni y en el municipio de Puerto Rico (Pando).
Fundación
En 1925 en Oruro se funda la congregación de las Misioneras Cruzadas de la Iglesia. Actualmente 15 casas de la comunidad se encuentran dispersas en ocho departamentos del país.
Museo
En 2015 en Oruro, se reabrió el Centro de Espiritualidad y Museo “Nazaria Ignacia”, ese espacio reúne la biblioteca, los cuatro tomos de su diario, además de otros archivos entre ellas las cartas espirituales que escribía Nazaria a sus seguidoras con el fin de mantener el carisma y la fidelidad a la congregación.
Pionera
Mons. Jesus Juarez
Arzobispo de Sucre
”Nazaria Ignacia mandó a sus hijas a las calles a buscar su dignidad, su libertad para que sus derechos sean concretados”. (Fue una de las primeras mujeres que impulsó el Sindicato de Palliris en la diócesis de Oruro).
