En los tiempos de la caída de la Unión Soviética y, luego, durante la guerra civil georgiana, las jaurías de perros que recorrían las calles de Tiflis representaban un peligro para sus habitantes, pero hoy con cariño y cuidados estos canes se han convertido en un elemento entrañable del paisaje urbano.
En 2019, para el rodaje de la película "Fast and Furius-9", las autoridades de la capital georgiana trasladaron todos los perros que había hecho suyas las calles del centro de la ciudad a un refugio municipal de Varketili, en las afueras de Tiflis, pero una vez concluyeron las filmaciones fueron devueltos a su hábitat.
Los perros se sienten cómodos en las calles de Tiflis, sobre todo en la avenida Rustaveli, la principal vía de la ciudad, y en la céntrica plaza Ingorokva, frente a la sede del Gobierno, donde se les puede ver echados al sol en los días despejados.
"Procuro no olvidar traerles algo de comida desde casa", dice Tamara Dvaladze, funcionaria administrativa del gabinete de Ministros.
Junto a la entrada de la estación de metro Politechnicheski Instituto, los vecinos habilitaron varias casitas en la que más de una decena de perros callejeros encontraron su hogar y reciben alimentos. "Mira, son muy buenos", dice Irma, una joven que presenta a los canes por su nombre: "Estos son Rex, Mailo, Lucy, Misho... Están esterilizados y son muy cariñosos".
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