Carlos Böhrt, exprefecto de Oruro, exparlamentario y exembajador, ha vuelto a la política después de 15 años de retiro. Admite que es una tarea cuesta arriba y critica tanto al oficialismo como a las actuales fuerzas opositoras en el Parlamento, donde estuvo sobre todo con el MIR, y en sus últimos periodos, con NFR y Podemos. Enarbola un discurso de unidad y ha fundado su propio partido en este “cierre de ciclo del MAS”, como él ve el momento actual de la política boliviana.
PREGUNTA (P). ¿Por qué decide volver a la política?
RESPUESTA (R). Me dediqué en estos últimos 15 años sólo a la academia y a hacer comentarios políticos. ¿Por qué decido volver? Por la situación del país. Bolivia ha ingresado a un escenario de serios indicadores económicos que nos aproximan a una crisis de proporciones, el ciclo masista se está agotando y, por el otro lado, las fuerzas de oposición, a lo largo de estos 17 años, han demostrado hasta la saciedad que no están preparadas, no tienen organización, no tienen una propuesta alternativa. Sí, se está cerrando el ciclo del MAS, se abre otro ciclo en la historia del desarrollo político de Bolivia y cada ciclo necesita sus instrumentos y de actores políticos. Nuestra obligación es entregar experiencia, aportar para que se cree el nuevo instrumento y que las nuevas generaciones asuman la conducción del país.
P. ¿Qué quiere ser Albus?
R. Albus está buscando ser un partido político. No nos planteamos como los salvadores. Estamos conscientes de los problemas y debilidades de la oposición. Creamos este instrumento y nos proyectamos como un factor de impulso de la unidad y, de hecho, en la práctica ya estamos actuando así (se refiere a su participación en la Junta Democrática lanzada en La Paz y al encuentro convocado por el Conade, Comité Nacional de Defensa de la Democracia, en Santa Cruz).
P. ¿Alcanzará el tiempo para obtener sigla y personería de cara a las elecciones de 2025?
R. Para llegar individualmente, que no es nuestra meta, pero sí, vamos a buscar la personería jurídica. Debemos crear la estructura, que es lo que estamos haciendo, hasta septiembre, octubre, y luego con esa estructura, pediremos los libros al Tribunal Electoral para recolectar las firmas y estimamos que ya por marzo, abril, estaríamos en condiciones de presentar los libros. Estamos informados, por diversas fuentes, que el Órgano Electoral, que no es independiente, ha recibido la instrucción del partido de Gobierno de obstaculizar la concesión de nuevas personerías jurídicas, porque el MAS no desea tener adversarios serios. Si no conseguimos la personería jurídica seremos una organización en condiciones de aportar en cualquier escenario de unidad y trataremos de ser miembros de una gran coalición que conseguirá su personería jurídica en base a los partidos tradicionales o a las organizaciones sociales desde los departamentos.
P. ¿Percibe a las dos fuerzas políticas de oposición en la Asamblea Legislativa (Comunidad Ciudadana y Creemos) como participantes activas en las elecciones de 2025?
R. Son las dos coaliciones electorales –y son sólo eso– que lograron en base a la personería jurídica de partidos tradicionales llegar a la Asamblea. El rol de sus bancadas parlamentarias ha sido casi imperceptible al extremo que en los últimos meses quien ha asumido el rol de oposición es Evo Morales y su facción. Creemos está en serios problemas internos: su líder (Luis Fernando Camacho) está en la cárcel y eso debilita su actuación, además su base parlamentaria se ha escindido y hay dos facciones. Comunidad Ciudadana no tiene este problema y, sin embargo, también se ha escindido y nos dicen que hay hasta tres facciones. No obstante, en especial CC, sistemáticamente se ha negado a participar en escenarios para crear la unidad. Ellos consideran que Carlos Mesa es el líder de la oposición porque en las encuestas tiene 15%, 18% de respaldo –para ellos es suficiente– y han anunciado que van a esperar hasta el próximo año para ver qué deciden. Hay un peligro: CC depende de la personalidad jurídica del FRI (Frente Revolucionario de Izquierda). En el caso de Creemos hay algo semejante y aún peor: la personalidad jurídica se consiguió gracias a Unidad Cívica Solidaridad (UCS) y el jefe de UCS, alcalde de Santa Cruz, está trabajando directamente con el Presidente Luis Arce Catacora; se sabe que UCS le ha ofrecido la sigla en caso de que el conflicto interno del MAS lo dejase sin organización política. Estas dos coaliciones debían analizar con mucho detenimiento su situación y sumarse a lo que la población está exigiendo: unidad.
P. ¿Cuál es su propuesta alternativa, los mínimos sobre los que están planteando la unidad?
R. Primer tema: ante el fracaso del Estado Plurinacional, recuperemos la nación boliviana intercultural y respetando la identidad de los pueblos indígenas, sus derechos. Debemos reconstruir el país. Segundo tema: hay que cambiar este modelo económico e implantar un modelo de libre mercado, que la empresa privada tenga incentivos para nuevamente invertir y, especialmente, la inversión extranjera directa; pero el próximo gobierno será de transición, porque hay que desmontar todo lo que ha hecho el MAS y necesita de recursos. Por lo tanto, planteamos un modelo de libre mercado con todavía roles del Estado en los sectores estratégicos: hidrocarburos, energía, telecomunicaciones, litio y sistema aéreo. Tercer tema: la corrupción. La única respuesta es desarrollar e implantar un gobierno abierto. Que la población, los medios, puedan acceder a la información que quieran en cualquier momento. ¿Cómo se consigue eso? Con sistemas, con reglas, con leyes, que obliguen a los administradores públicos a mostrar cuando cualquier persona les pida la información. Y, los pillos deben ir a la cárcel y deben devolver lo que le quitan al Estado. Hay que reformar las normas. Bolivia no puede seguir con el sistema de pena máxima de 30 años de cárcel, hay que aumentar eso, hay que sumar las penas. Y el cuarto tema: la descentralización. Hay dos vías: o realmente implantamos las autonomías y las profundizamos, que no es materia fácil y para eso hay que modificar la Constitución, o damos finalmente el paso: adoptamos el federalismo y para eso también hay que modificar la Constitución.
P. ¿Se ve como candidato a la presidencia?
R. No me veo como candidato. No quiero ser candidato porque, debemos insistir, hay que construir la unidad, hay que hacerlo, y en esto compartimos con El Bunker. La propuesta es que haya pre-primarias, por fuera del Órgano Electoral, que nosotros organicemos, y ahí vamos cinco, seis, siete precandidatos. Yo no deseo participar en eso, aunque no sé qué dirá mi organización; pero no importa, tiene que ser la población la que decida con su voto a quién quiere apoyar y todos apoyamos a ese candidato. [P]