¿UNA MESA SERVIDA PARA EL CONFLICTO?
Los departamentos de Chuquisaca y Potosí, todo parece indicar, perderían escaños. ¿Qué piensan sus autoridades al respecto y qué proponen? ¿Santa Cruz, el departamento que parece ser el más beneficiado con los nuevos resultados, estará dispuesto a barajar opciones conciliadoras? Enfrente emerge un problema mayúsculo que se puede convertir en un conflicto.
No esperan ningún milagro, Chuquisaca y Potosí saben que perderán escaños.
Eso, si terminan aplicándose los resultados de población del último Censo sin cambios y acaba sin efecto el referéndum que anunció el 6 de agosto pasado el presidente Luis Arce.
¿Les quita el sueño? Sí y no. Ninguno de los dos departamentos quiere ver disminuida su representación en el Órgano Legislativo. Sin embargo, lo que los tiene en cierto estado de alerta no es solo esto.
Resultados
De acuerdo con el Decreto Supremo 4824, el Gobierno dará curso a la redistribución de los recursos de coparticipación tributaria en septiembre próximo con base en los resultados preliminares de población del último Censo, tal como se comprometió en 2022.
Eso significa que este mes se confirmaría lo que casi todos sospechan desde hace ya bastante tiempo: que Santa Cruz fue el departamento que más habitantes ganó en los últimos diez años y que, al contrario, Chuquisaca y Potosí, al igual que otros departamentos pequeños, perdieron población o no registraron el mismo ritmo de crecimiento demográfico que en el eje central.
Salvo sorpresa de último momento –algo poco probable–, el Instituto Nacional de Estadística (INE) entregará los resultados preliminares de población el 30 de agosto, es decir, dentro de menos de dos semanas. Y una vez que se publiquen esos resultados, cada departamento podrá tomar la calculadora y adelantarse a ver si perderá o ganará escaños cuando al Tribunal Supremo Electoral (TSE) le toque sentarse a redistribuir las bancas en el Legislativo, tal como manda la Constitución y la normativa vigente.
Perderán escaños
Tanto Chuquisaca como Potosí perderán al menos un escaño. De acuerdo con la última proyección de la “Ruta del Censo”, una iniciativa ciudadana de acompañamiento al proceso censal, Santa Cruz ganará al menos cinco. En cambio, Chuquisaca, Potosí, Oruro e, incluso, La Paz perderán al menos una banca cada uno.
A propósito de esto, el ministro de Justicia, Iván Lima, en marzo pasado dio casi por hecho que al menos seis departamentos verán disminuir su representación. ¿Cuáles? Los que no forman parte del eje central del país.
Referéndum
El presidente Luis Arce propuso el reciente 6 de agosto un referéndum para consultar a los bolivianos si se debe o no incrementar el número escaños parlamentarios. Se lo convocaría para el 1 de diciembre, junto con las elecciones judiciales.
De acuerdo con el ministro Lima, lo que busca el Gobierno con esta consulta es que ningún departamento pierda escaños. Esto permitiría “romper el candado” de la Constitución, con relación al número de diputados –130 en total–, e incrementar el número de bancas de los departamentos que hayan crecido en población en la última década. Según criterio del Gobierno, de esta manera se evitaría un posible conflicto por los curules.
Conscientes de que los números del Censo no los favorecerán, en principio, las autoridades de Chuquisaca y Potosí abogan por no perder escaños. Y tienen una fórmula.
La postura de Chuquisaca
El alcalde de Sucre, Enrique Leaño (MAS), considera que, si bien los resultados del Censo 2024 reflejarán la realidad de Chuquisaca, este departamento no tendría que perder escaños. No debería, si el país quiere seguir teniendo nueve departamentos representados en el Parlamento, dice él.
De acuerdo con sus proyecciones, es casi un hecho que Chuquisaca deberá desprenderse de entre uno y dos diputados. Frente a esto plantea incrementar el número de escaños de los departamentos que hayan ganado población y mantener el de los que hayan perdido habitantes, una vez que se confirmen los resultados del Censo 2024.
“Nosotros habíamos planteado ya que no se disminuyan los diputados y que los departamentos que hayan crecido puedan aumentar los representantes que necesiten, porque, si no, nos vamos a quedar sin diputados”, argumenta.
En ese entendido, el burgomaestre respalda la propuesta de Arce de incrementar el número de escaños en la Cámara de Diputados por medio de un referéndum. “Nos parece una solución equitativa y ecuánime. Si no, los departamentos pequeños, poco a poco, vamos a ir desapareciendo”, insiste.
Leaño dice que confía en que los departamentos grandes no actuarán con “egoísmo” y que permitirán que los pequeños mantengan su actual representación parlamentaria, ya que esa fórmula “no les afectaría en nada”. En lo que también se debería poner especial atención, según el alcalde, es en la redistribución de los recursos de coparticipación, algo que considera “importante”. A su juicio, la redistribución ya no debería hacerse únicamente por población. “Nosotros habíamos puesto el ejemplo de lo que hacemos en el municipio de Sucre: 40% lo distribuimos por población, 40% por el índice de pobreza y 20% de forma igualitaria entre todos los distritos”.
La administración del gobernador Damián Condori, de acuerdo con sus proyecciones, también cree que Chuquisaca perderá al menos un escaño. Pero no es algo que le preocupe en extremo. Tiene puesto su principal foco sobre la redistribución de recursos. Considera que el debate debe centrarse en ese asunto y no tanto en la redistribución de escaños.
“Perder un escaño… es perder un diputado más, un diputado menos (…). Una disminución no creo que mejore la situación de Chuquisaca. Es una falsa discusión concentrarnos en la pérdida de escaños cuando el tema de fondo es la reducción de los recursos, del presupuesto que se nos asigna por el tema poblacional. Ahí deberíamos considerar otros criterios para la distribución”, sostiene el secretario de Planificación de la Gobernación, Juan Melendres.
En esa línea, la administración departamental cree que consultar a los bolivianos sobre la distribución de escaños en un referéndum “no es la mejor decisión”.
“Estamos discutiendo temas superficiales. Proporcionalmente, no vamos a cambiar. Nuestro 5% (en referencia al porcentaje de población Chuquisaca) va a seguir siendo 5%. Nuestro poder de influir en las decisiones a nivel nacional no va a cambiar. Creo que no es muy relevante discutir el tema de escaños, sino la nueva forma de distribución de los recursos. El Gobierno central tiene en su poder más del 87% de los recursos (…). Creo que ese es el tema de fondo”, remarca Melendres. Además, dice que seguir aumentando el gasto corriente con más diputados “no sé si es la mejor decisión”.
En ese entendido, lo que la Gobernación de Chuquisaca plantea es crear o abrir nuevas fuentes de financiamiento, tomando en cuenta que los recursos del gas, de acuerdo con las proyecciones que maneja, se agotarán en 2029. “Por eso hemos pedido que nosotros seamos parte de los recursos de coparticipación tributaria (…). Hemos dicho que nivel nacional debería manejar el 50% y el otro 50%, los departamentos, es decir, universidades, gobiernos municipales y gobernaciones”.
Por otro lado, se deberían crear “fondos de compensación o de reactivación”, entre otras medidas. En suma, la discusión tendría que centrarse en la construcción de un nuevo pacto fiscal. “De lo contrario, las gobernaciones estamos rumbo a desaparecer o a declararnos en quiebra”, alerta Melendres.
Para el diputado chuquisaqueño Marcelo Pedrazas (CC), lo central debería ser que ningún departamento pierda escaños. En ese entendido, él plantea eliminar, por ejemplo, los suplentes y los supraestatales, con el objetivo de incrementar la representación de los departamentos que hayan ganado población, sin perjudicar a los otros departamentos. Con esto se evitaría “un gasto excesivo” en parlamentarios por parte del Estado. Él no ve con malos ojos que este tema se resuelva en un referéndum.
La postura de Potosí
Las administraciones del alcalde Jhonny Llally y del gobernador Marco Copa aún trabajan en una postura oficial sobre esta cuestión, aunque inicialmente ninguno apoya que Potosí se resigne a perder escaños.
El burgomaestre potosino tenía planeado discutir el asunto esta semana con su gabinete, con el objetivo de definir una postura; sin embargo, adelantó que el debate no debería centrarse solo en la redistribución de escaños, sino también en la redistribución de recursos. “Seguramente va a haber también de alguna u otra manera (un debate sobre) el tema del pacto fiscal”, dice Llally, sobre “el tema de los escaños, no tendríamos por qué perder”.
Consultado por PÉNDULO POLÍTICO sobre si respalda la propuesta del Gobierno de incrementar escaños a los departamentos que hayan ganado población y mantener el número de representantes de los departamentos que la hayan perdido, se muestra a favor, aunque reitera que su administración aún sigue trabajando una postura oficial.
La administración de Copa, por su lado, prevé definir una posición la próxima semana. Entretanto, adelantan que no está de acuerdo con que Potosí pierda escaños. “No sería equitativo”, dice el asesor estratégico de la Gobernación, Wilfran Chavarría. “Nosotros somos los que sostenemos la economía nacional”, añade, para señalar que el debate no solo debe considerar el factor poblacional.
“No, absolutamente”, insiste cuando se le pregunta si se debe hacer la distribución de escaños con la normativa vigente, con la que Santa Cruz ganaría más escaños, en desmedro de departamentos como Potosí. “Tampoco lo vamos a permitir, como departamento, porque la representación es importante”, advierte. Luego, dice que la representación también “tiene que ser proporcional” al aporte de los departamentos a la economía nacional.
Para el exsenador opositor Edwin Rodríguez, la redistribución de escaños debería someterse a referéndum, pero no como lo plantea el Gobierno. Con los resultados del Censo 2024, dice, seguramente Potosí perderá al menos dos escaños.
En ese entendido, plantea que se incremente el número de parlamentarios a los departamentos que hayan ganado población, pero eliminando los nueve senadores y los nueve parlamentarios supraestatales que se añadieron en 2009 con la nueva Constitución.
Esos escaños deberían servir para incrementar las bancas de los departamentos que hayan ganado habitantes. “Así, Potosí no va a perder ninguno y los que tengan que ganar, que ganen; y los que tengan que perder, que no pierdan”, agrega. En su criterio, esa es la fórmula que se debería consultar en el referéndum. [P]
Lo que dicen los analistas
El analista chuquisaqueño Oscar Montero considera que “las asimetrías poblacionales ya están dadas”. Por lo mismo, cree que no vale la pena lamentarse por la pérdida de escaños. “Debiéramos estar conscientes de lo que nos va a tocar”, dice, siempre y cuando el Censo 2024 se haya realizado de manera correcta.
“Creo que no es el problema el número de representación parlamentaria. Como anunció el presidente Arce, pareciera que aumentando parlamentarios solucionamos el problema. Eso, en absoluto, no (…). Aumentamos la cantidad de diputados, en esa proporción (según el incremento de su población), igual Santa Cruz, Cochabamba… se van a llevar más (diputados), y vamos a terminar en los mismo”, sostiene.
En esa perspectiva, agrega, Chuquisaca no debería concentrarse en “llorar sobre la leche derramada”, sino en “ver cómo podemos equilibrar ciertas políticas redistributivas”, de manera que este y otros departamentos pequeños puedan tener lo suficiente para sustentar o pagar servicios elementales como la educación, la salud y otros.
Montero remarca que otro de los temas que se debería poner en debate es la representación del área urbana versus la del área rural. Se trata de “algo que pareciera no está sobre la mesa”, dice. “Bolivia tiene ahora una realidad distinta. Bolivia es predominantemente urbana y, si hacemos una mirada al Legislativo o a todas las asambleas (departamentales) y concejos municipales, tenemos una participación mayoritaria del área rural, y esto es lo que el Censo, creo, debiera cambiar, si queremos que todos los ciudadanos estén muy bien representados (…). En las ciudades tenemos la mayor cantidad de población, y ahí debiera estar concentrada la mayor cantidad de representación del Parlamento (…). Se debiera hacer una reconfiguración total”.
El analista potosino Javier Flores, por su parte, defiende que “la representación parlamentaria siempre va a ser importante”, pues los departamentos con menor población también deben estar bien representados en el Parlamento. Cree que la propuesta del Gobierno de llevar este tema a un referéndum es “positiva”, porque permitirá que departamentos como Santa Cruz incrementen sus bancas en el Legislativo, sin provocar que los que tienen menor población, como Potosí, pierdan escaños.
“No solo se tendría que ver la cantidad de parlamentarios, sino también ver cuánto se aporta”, acota, en referencia al aporte de Potosí al PIB del país. Es decir, señala que el debate no debería solo considerar el tamaño de la población de los departamentos a la hora de definir la representación parlamentaria.
“Tenemos que ver la forma de cómo los departamentos que estamos disminuidos no sigamos decreciendo”, complementa. Eso supone discutir también un nuevo pacto fiscal, con el objetivo de generar equidad. “No puede el eje seguir creciendo, como hasta ahora, en desmedro de los otros departamentos”, insiste.
Por otro lado, remarca que, con la decisión del Gobierno de escuchar o sentarse con sectores como el privado, para buscar salidas a la crisis económica, se están “rompiendo paradigmas”, algo que no habría ocurrido en otro escenario, si se toma en cuenta el rótulo de socialista del Gobierno, o del MAS.
Hay que aprovechar este escenario para discutir estos temas y evitar una confrontación o convulsión social, concluye Flores. [P]