El MAS procesará a Pérez por su vínculo con Cordero

Podría terminar expulsado del partido. El MAS avisó ayer que denunciará al asambleísta Pablo Pérez (MAS) ante el tribunal de ética de la organización política, luego de que saliera a la luz una conversación privada entre el legislador y el asambleísta opositor Eusebio Cordero (CST), que desnuda, supuestamente, las verdaderas razones de la salida de las Siervas de María del Hospital Santa Bárbara.

"La cuestión de fondo es que hay una relación muy estrecha, muy directa, entre el señor Pérez y el asambleísta Cordero. Hay una instrucción precisa del asambleísta Pérez hacia el asambleísta Cordero. Nosotros no teníamos conocimiento de esta relación tan estrecha y de la instrucción que da Pérez al asambleísta Cordero, para que salga a los medios de comunicación a 'reventar' al MAS. Creemos que eso se va a tomar muy en cuenta y se va a pasar a la comisión de ética, y, si amerita, (vendrá) la expulsión", dijo el jefe departamental del MAS, Marcel Orgáz.

El lunes circuló en las redes sociales una grabación sobre una conversación privada entre Pérez y Cordero, en la que el asambleísta oficialista acusa a algunos mandos medios de la administración del gobernador Esteban Urquizu de presionar a las Siervas de María para que dejen el Hospital Santa Bárbara.

Orgáz negó ese extremo y aseguró que las religiosas decidieron irse por decisión propia.

Luego de que se conociera la grabación, Cordero ratificó que sí hubo presión del entorno de Urquizu y denunció que su teléfono móvil fue, según él, "pinchado".

Orgáz rechazó la denuncia y dijo que sospecha que la grabación salió de uno de los teléfonos móviles que usan Cordero y Pérez.

El asambleísta Oscar Alfaro (MAS) coincidió con Orgáz. Rechazó que las religiosas hayan recibido algún tipo de presión y que el móvil de Cordero haya sido intervenido.

El asambleísta José Ortiz (MAS), por su lado, protestó por la "flaqueza" en el mando de la Dirección Departamental de partido y sugirió que Pérez sea denunciado ante el tribunal de ética.

La asambleísta opositora Elsa Guevara (FRI) dijo, en cambio, que la filtración de la grabación es una muestra de que "hay persecución política" en la región.