Evo ve "grave ofensa" chilena en pedido al Papa sobre mar
La agenda de Francisco en Chile contempla tratar el conflicto con los mapuches
El presidente Evo Morales endureció sus críticas contra Chile, tras el pedido de que el papa Francisco no aborde el tema marítimo durante su visita a ese país, algo que calificó ayer como una “grave ofensa”.
En un mensaje publicado en su cuenta en Twitter, dijo que este intento no podrá callar el respaldo de presidentes y personalidades chilenas a la resolución del diferendo que enfrentan ambos países desde 1879, tras la invasión chilena y posterior Guerra del Pacífico que dejó al país sin su cualidad marítima.
"Prohibir callar al hermano Francisco es grave ofensa contra el papa de los pobres. La oligarquía chilena acostumbrada a mandar a callar" (sic), dijo.
Luego, en otro mensaje, manifestó que “Chile quiere callar al hermano Papa Francisco, pero no callará a 48 presidentes y 45 personalidades chilenas que respaldan #MarParaBolivia”.
El Gobierno de Chile espera que el papa Francisco se abstenga de mencionar el tema de la demanda marítima de Bolivia durante el viaje que realizará a ese país del 15 al 18 de enero, según explicó el martes el embajador chileno ante la Santa Sede, Mariano Fernández.
"Por miedo el gobierno chileno pide a hermano papa Francisco que no hable de demanda #MarParaBolivia. Pero la verdad es imparable como el mar" (sic), sostuvo el Mandatario ese día en alusión al pedido de Fernández.
Francisco viajará a Chile y Perú en el que será su quinto viaje a Latinoamérica. En una visita a Bolivia el 2015, el Papa sostuvo que hay que "evitar conflictos con los países hermanos" y añadió: "Estoy pensando en el mar. Diálogo, diálogo".
El diplomático anunció el martes que su país cumplirá el fallo que emane de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya sobre el diferendo marítimo, por lo que insistió: "El Gobierno de Chile pide a toda persona que se abstenga de opinar hasta que se pronuncie el tribunal de La Haya (...) Eso se lo pedimos no solo al Papa sino que a toda persona, a los amigos, a la opinión pública, que no se pronuncien hasta el fallo, que cumpliremos rigurosamente, sea cual sea".
CHILE DESESPERADO
El viceministro de Autonomías, Hugo Siles, dijo ayer que el Gobierno ve desesperación en Chile ante el sólido argumento que sostiene la demanda marítima boliviana que se ventila en la Corte Internacional de Justicia para obtener una salida soberana al Pacífico.
"Es una desesperación que tiene el vecino país para poder argumentar el tema ante nuestra dúplica, réplica y memoria, que tiene un alto contenido de la realidad histórica de ambos países", indicó.
Siles afirmó que "nadie puede limitar al Papa a realizar sus declaraciones o percepciones sobre este tema".
DISPUTA LEGAL
Ambos países esperan el inicio de la fase de alegatos orales en la CIJ, una vez que se agotó la etapa escrita del proceso, en el que Bolivia pide que se obligue a Santiago cumplir con sus compromisos hechos a lo largo de la historia de negociar una salida soberana al Pacífico. Según La Moneda, no existen obligaciones derivadas de los ofrecimientos.
La Paz y Santiago firmaron el Tratado de 1904 que terminó por delimitar las fronteras entre ambos países, sin embargo el Gobierno boliviano afirmó en reiteradas ocasiones que no resolvió el diferendo y por ello es una constante la demanda de una salida soberana al Pacífico.
LA AGENDA DEL PAPA
El conflicto entre los mapuches y el Estado y los problemas de los inmigrantes serán los ejes de la visita del Papa a Chile.
"Esperamos que la visita sea un aporte al diálogo, la paz y el respeto a la diversidad", manifestó ayer el director ejecutivo de la Comisión Nacional para la Visita del papa Francisco, Javier Peralta, en un encuentro con la prensa internacional.
Los organizadores de la visita evitaron pronunciarse sobre las declaraciones del embajador Fernández, ante las preguntas.
"El papa tiene fuentes de información de lo que está sucediendo (...), la decisión que él tome será fundada en lo que sabe", señaló Peralta.