Gobierno y UPEA instalan diálogo en medio de tensión
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La Universidad Pública de El Alto (UPEA) y el Gobierno ensayan hoy, viernes, un intento de diálogo para poner fin a la crisis desatada por el tema presupuestario y agravada tras la muerte del joven Jonathan Quispe, luego de que ayer se desarrollara una nueva jornada de movilizaciones.
Los presidentes de las dos cámaras legislativas enviaron una nota oficial a la UPEA en la que plantearon una reunión para hoy, viernes, a las 7:00 en la Vicepresidencia, con la presencia de ministros, y diez delegados de la universidad, de la FEJUVE y de la Central Obrera Regional (COR).
La respuesta no se dejó esperar y la máxima autoridad de la universidad alteña, el rector Ricardo Nogales, aceptó la invitación mediante otra nota.
"Tenemos a bien comunicarle que la UPEA asistirá a la reunión programada (…) con la finalidad de abrir el diálogo y escuchar las propuestas sobre la modificación a la Ley 195", señala la misiva.
La UPEA bajó sus pretensiones, porque hasta ayer demandaba que el diálogo se realice en El Alto y con la presencia del presidente Evo Morales; además, ratificaba su exigencia de renuncia de los ministros de Economía, Mario Guillén y de Gobierno, Carlos Romero, y del viceministro de Presupuesto, Jaime Durán.
Ayer, miles de manifestantes marcharon desde El Alto hasta La Paz para reclamar justicia por la muerte del universitario Quispe, el 24 de mayo.
La marcha congregó a asociaciones y sindicatos que apoyan la petición de la UPEA de modificar la Ley de Coparticipación Tributaria, lo que permitiría ampliar el presupuesto de la universidad.
"Lo que queremos es que se modifique la ley 195", explicó Nogales.
Ante esa petición, el miércoles el Gobierno ofreció una subvención extraordinaria a la UPEA para solventar la situación económica, ya que modificar la ley implicaría "quitarle a otros sectores", advirtió el Ministro de Economía.
La UPEA rechazó ayer esa subvención y desmintió que no haya recursos suficientes para aumentar el presupuesto. "Desde hace cuatro años nos están dando subvención extraordinaria, queremos la modificación, no queremos salir cada año, estamos molestando a la población paceña", insistió el rector.
ALIANZA Y PROTESTA
Los rectores de la UPEA y la UMSA, Nogales y Waldo Albarracín, pactaron ayer una lucha conjunta por el tema presupuestario, en medio de la instalación de un piquete de huelga de hambre, y una masiva movilización de universitarios que llegó a la plaza Murillo.
Los universitarios alteños llegaron al Monoblock de la UMSA, donde el Comité de Movilizaciones de los estudiantes le brindó su respaldo y protagonizaron un mitin de protesta en la plaza del Bicentenario.
Entretanto, en el edificio de la UMSA se instaló el séptimo piquete de huelga de hambre de estudiantes de la UPEA. Ocho personas se declararon en ayuno voluntario.
Albarracín sostuvo que las autoridades no dividirán a ambas universidades y ratificó el pedido de renuncia del ministro Carlos Romero y de los comandantes de la Policía nacional y de El Alto.
Luego, la movilización de universitarios se dirigió hacia la plaza Murillo. Con gritos, cánticos y petardos, los estudiantes marcharon alrededor del centro político del país, mientras la Policía estaba alerta con sus efectivos antimotines.
La protesta llegó hasta la esquina de las calles Potosí y Ayacucho, donde se ubica el nuevo Palacio de Gobierno, donde los movilizados quemaron un muñeco y exigieron una audiencia con el Jefe de Estado.
Los estudiantes estuvieron a punto de ingresar a la obra en construcción, pero los mismos dirigentes y docentes pidieron evitar actos de vandalalismo, aunque algunos estudiantes arrancaron calaminas del muro exterior del nuevo edificio y pintarrajearon su fachada.
INVESTIGACIÓN BAJO RESERVA
La investigación de la muerte de Quispe fue declarada en "reserva" por el Ministerio Público y no se proporcionarán detalles sobre el hecho hasta que concluyan las pesquisas.
El fiscal César García sostuvo que se trata de un caso complejo.