La SIP condena propuesta de Evo, pero él se ratifica

La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) reprobó ayer que el presidente Evo Morales aliente la aprobación de una ley o estatuto contra la mentira, una medida que, según esta entidad, tiene como objetivo "silenciar y censurar la crítica". Más temprano, en Monteagudo, el Jefe de Estado ratificó su criterio por sacar adelante la norma.

El presidente de la SIP, Gustavo Mohme, apuntó que "cuando a un Mandatario le incomodan las denuncias de corrupción y las opiniones contrarias suele promover la aprobación de esta clase de estatutos con la intención de silenciar y censurar la crítica".

La propuesta de Morales, quien lleva más de 12 años en el poder, surgió pocos días después de acusar a la oposición y a algunos medios de comunicación de difundir mentiras para desacreditar a su Gobierno.

Desde 2016, la SIP viene denunciando que el Gobierno de Bolivia califica de "cártel de la mentira" y "terroristas mediáticos" a periodistas, diarios y emisoras de radio independientes que realizan trabajos de investigación periodística.

Morales declaró a la prensa como su "enemigo número uno", agregó la SIP, con sede en Miami.

El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Roberto Rock, citó la Declaración de Chapultepec en la que se establece que "ningún medio de comunicación o periodista debe ser sancionado por difundir la verdad o formular críticas o denuncias contra el poder público", cuyos funcionarios están expuestos a mayor escrutinio.

Morales defendió ayer mismo la conveniencia de una "ley contra la mentira", al calificar de "confesos mentirosos" a quienes cuestionan una norma de este tipo por inconstitucional y contraria a la libertad de expresión.

"No queremos molestar a nadie, pero escuché que algunos respondieron", dijo el Mandatario en referencia a las críticas de opositores y sectores de prensa a una ley de ese calado.

El Primer Mandatario aseveró que quienes "dicen no" a esta norma "son confesos mentirosos".

"El que no miente está feliz (de) que haya leyes, pero el que miente, tiene miedo a una ley contra la mentira", añadió en su discurso en Monteagudo.

La oposición y entidades como la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) advierten de que una ley contra la mentira vulneraría la Constitución y tratados internacionales firmados por el país con relación a derechos fundamentales como la libertad de expresión y de prensa.