Salvatierra muestra su certificado de nacimiento
La nacionalidad de su madre, que nació en Chile, no la complica, afirma la legisladora
AUTORIDAD. La presidenta del Senado, Adriana Salvatierra, se dirige a los periodistas. La presidenta de la Cámara de Senadores, Adriana Salvatierra, mostró ayer su certificado de nacimiento y se declaró "orgullosamente boliviana", después de que se conociera que su madre es chilena y de que en las redes sociales se pusiera en duda su nacionalidad por esa causa.
"Yo soy orgullosamente boliviana. Nací en Santa Cruz. Aquí está mi certificado de nacimiento (...), para que se eviten especulaciones y se ahorren campañas innecesarias y evitemos las mentiras, porque el debate político debe ser sobre la base de la verdad", dijo la titular del Senado, con una copia original de su certificado de nacimiento en la mano.
Consultada sobre si tiene doble nacionalidad, respondió: "Nací en Santa Cruz. Soy boliviana. Entonces, ¿por qué entrar en ese debate?".
Salvatierra tuvo que salir al paso, luego de que el diario chileno La Tercera publicara, como ya lo habían hecho otros medios tanto del país como de Chile, que la madre de la titular del Senado, Luisa Herminia Arriaza, nació en Chile.
Salvatierra, en la entrevista con La Tercera, reiteró que su padre, Hugo Salvatierra, y su madre se conocieron en Chile durante la época de la dictadura.
"(Mis padres) se separaron durante 13 años, porque el golpe de Estado de Pinochet separó a la familia en ese momento. Mi padre se trasladó posteriormente al exilio en Europa, retornó a Bolivia y aquí volvieron a encontrarse mis padres y a los años nací yo", contó la legisladora.
Salvatierra agregó que su madre era campesina y que en Bolivia tuvo la oportunidad de estudiar, algo que no hubiera podido hacer en Chile, porque el costo de la universidad era inaccesible.
"Entonces (el que mi madre sea chilena) jamás significó un conflicto ni para mi militancia, ni para mi identidad ni para mi construcción política", afirmó la legisladora.
Finalmente, dijo que se identifica plenamente con la demanda marítima. "Creo fundamentalmente en la justicia, en la verdad histórica y en la razón legítima de los pueblos de buscar soluciones pacíficas, dialogadas a conflictos como este", proclamó.
