Bolivia celebra Día del Mar bajo la sombra de La Haya
El Gobierno señala que el país no renunciará a su derecho de acceso al Oceáno Pacífico
El país celebra hoy un nuevo Día del Mar, el primero desde el fallo adverso de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con críticas e incluso pedidos de juicio para los responsables de la demanda marítima. El presidente Evo Morales no asistió ayer al inicio de los actos conmemorativos, que en estos dós últimos días se reeditan en todo el país, y fue el vicepresidente Álvaro García Linera quien se encargó de mandar un mensaje de confianza al señalar que el país no cesará "en la búsqueda de que nuestro derecho al mar en justicia se cumpla".
A horas de la conmemoración, García Linera recordó el fallo que hace medio año dictó el máximo tribunal de justicia de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que estableció que Chile no está obligado a negociar una salida soberana al Pacífico, como demandó Bolivia en 2013. Sin embargo, precisó que la CIJ dejó en claro dos elementos a favor: que el país nació en 1825 con una costa de 400 kilómetros y la segunda que el Tratado de 1904 no resolvió temas pendientes con Chile respecto a una salida al mar. El canciller Diego Pary agregó una tercera premisa a favor, que la CIJ alentó a que se retome el diálogo. Varios legisladores del partido gobiernista también se pronunciaron en esa línea.
"Seguimos en la búsqueda de que nuestro derecho de salida al mar en justicia se cumpla (...). Siempre vamos a reclamar nuestro derecho al mar", recalcó García Linera, durante un acto con estudiantes, en el que también planteó que se perfilan algunas estrategias para que el vecino país se siente a dialogar, como dejar de utilizar los puertos del norte de Chile para el comercio internacional boliviano y lograr que el país crezca económicamente hasta convertirse en un poder.
"Queremos poderío económico, porque si tenemos poderío económico tenemos poderío geopolítico y nuestra voz en el continente tendrá más peso", sostuvo al precisar que en el pasado la diferencia económica entre Bolivia y Chile era de 14 a 1, y que actualmente es de 14 a 7.
"Nos sentimos tristes y nos da rabia que nos hayan quitado nuestro mar, nos da rabia que la Corte no obligue a Chile, pero no nos rendimos, como generación, como juventud no nos rendimos, nuestro objetivo es económicamente ser más fuerte que Chile, lo estamos logrando".
Pary aseguró ayer, en una entrevista televisiva, que la reivindicación marítima nacional está "vigente" y consideró que sólo la unidad permitirá lograr su recuperación.
Bolivia nació en 1825 a la vida independiente con mar, sin embargo, en 1879 Chile invadió el litoral boliviano y, posteriormente, inició una guerra no declarada que privó al país de 400 kilómetros de costa y 120 mil kilómetros cuadrados de territorio según datos históricos.
En 2013, por primera vez un Gobierno sentó a Chile ante la CIJ de La Haya, para resolver el diferendo con ese país y aunque el fallo fue adverso, ese tribunal instó a seguir con el diálogo para superar conflictos y garantizar una "buena vecindad".
La adversidad de este fallo, alentó a que legisladores de oposición como el senador y candidato presidencial por “Bolivia dice no”, Óscar Ortiz, hace unos días, y el diputado Rafael Quispe, ayer, planteen procesar a los impulsores de la demanda ante la CIJ.
"Vamos a impulsar el juicio de responsabilidades en contra de Evo Morales, (Álvaro) García Linera y juicio ordinario en contra de (Eduardo) Rodríguez Veltzé y en contra de (Carlos) Mesa Gisbert, porque esos son los traidores a la patria", declaró Quispe.
Para el diputado opositor Amilcar Barral, también es necesario que el Gobierno informe sobre los gastos en la demanda marítima.
El jueves, miembros de una plataforma ciudadana también demandaron sanciones durante un pronunciamiento en la plaza Murillo, de donde no tardaron en ser desalojados.
El canciller Pary cuestionó que grupos de oposición aprovechen la situación y con una clara intencionalidad política busquen dar otra lectura al fallo de La Haya, el mismo que en su momento realzaron.
"La demanda ha sido un emprendimiento colectivo, responsables somos todos de los logros que obtuvimos luego de varias décadas de inacción en el tema marítimo", aseguró.
Representantes de organizaciones sociales afines al oficialismo aseguraron ayer, viernes, por separado, que "jamás" renunciarán a que el país cuente con una salida soberana al océano Pacífico y respaldaron la gestión gubernamental ante la Corte de La Haya.
Actores de oposición señalaron que la crítica contra el Gobierno por esta causa, probablemente motivó al presidente Morales a no estar presente en el inicio de los actos conmemorativos por el Día del Mar.
La tarde de ayer se dio inicio a los actos cívicos por el 23 de marzo, con el traslado de los restos del héroe del Pacífico, Eduardo Abaroa, hasta la plaza del mismo nombre en la Sede de Gobierno.
Los restos de Abaroa fueron escoltados por miembros de la Armada, el Ejército, los Colorados de Bolivia y la Caballería Militar desde la plaza de San Francisco hasta la plaza Abaroa.
Ante la ausencia de Morales, la ceremonia fue encabezada por García Linera, Pary y un par de ministros más, entre varias otras autoridades regionales. Pary precisó que hoy, sábado, los actos en homenaje a la defensa de Calama se desarrollarán de manera habitual, como todos los años, y el presidente Morales se referirá en su discurso "a las acciones importantes que se impulsaron en estos años" en el objetivo de retornar al Pacífico.
El diputado y candidato a vicepresidente por “Bolivia dice no”, Edwin Rodríguez, exigió que el discurso presidencial incluya un informe de la segunda demanda que enfrenta a Bolivia y Chile en La Haya, por las aguas del Silala , para evitar un desenlace como en el tema del mar.
El viceministro de Educación Regular, Valentín Roca, informó que cientos de estudiantes desfilarán a nivel nacional con las consignas de que nunca se renunciará a la aspiración marítima. En redes sociales, sin embargo, muchas personas criticaron que se siga alentando, entre la juventud, un sentimiento de derrotismo tras el fallo de La Haya, que marcó un retroceso en las pretensiones nacionales de acceder al Oceáno Pacífico.
En Santa Cruz, plataformas ciudadanas convocaron a una movilización de protesta por cómo desencadenó la demanda marítima.