Concejal del MAS en Cochabamba pide que Evo gobierne "hasta donde Dios quiera"
Desde el oficialismo vuelve a invocar a Dios, así como suman los pedidos de que el Primer Mandatario se quede incluso más allá del 2025, en caso de ganar las próximas elecciones.
En el Movimiento Al Socialismo (MAS) quieren que el presidente Evo Morales gobierne el país más allá de 2025. El presidente del Concejo Municipal de Shinahota, en Cochabamba, Raúl Cruz Veizaga, pidió este sábado a la militancia “aplastar y enterrar nuevamente a la oposición” en las elecciones generales de octubre próximo para que Morales “siga gobernando hasta donde Dios quiera, no solamente hasta 2025”.
“Ustedes saben hermanos, estamos en año electoral y este 20 de octubre (día de las Elecciones Generales) nos toca nuevamente aplastar a esta oposición, enterrar con un 70% en apoyo a nuestro hermano presidente Evo Morales para que siga gobernando hasta donde Dios quiera, no solamente hasta 2025, sino hasta donde Dios quiera”, afirmó.
La declaración del oficialista se dio durante la entrega del instituto tecnológico “Álvaro García Linera”, que realizó el presidente Morales en el Trópico de Cochabamba, para la formación de profesionales. La obra demandó una inversión de 10 millones de bolivianos.
En su intervención, el Concejal del Movimiento al Socialismo (MAS) exigió ser agradecido con el primer mandatario porque “fue el único que se preocupó por los jóvenes”. Además, pidió no olvidar las luchas de los cocaleros, que en su criterio, la oposición pretende arrebatar con mentiras.
Por su lado, el presidente Morales sostuvo que la capacidad profesional hay que acompañar con la conciencia social. Dijo que antes quienes hacían esta clase de obras, en tema educativo, era el movimiento campesino.
Morales señaló que “nosotros no solamente luchamos por la coca, por derechos humanos o por tierra, sino luchamos para garantizar la independencia de Bolivia, la soberanía del estado, la dignidad del pueblo boliviano, defendiendo nuestra identidad”.
Un "enviado de Dios"
El pasado 31 de marzo, el gobernador de Chuquisaca, Esteban Urquizu, en Monteagudo, dijo: "Nuestro Presidente es otro enviado de Dios para el pueblo boliviano, como nuestros héroes que llevamos, en honor a la verdad, en nuestro corazón. Nos guía, nos orienta... es la voz del proceso de cambio que vivimos en el pueblo boliviano".
Días más tardes, ratificó sus palabras, en una conferencia de prensa, arguyendo su inclinación religiosa: “Yo soy católico, como católico, como padre de familia, soy humano (…) Pero yo les digo, ese guía (por Evo) es de nuestro señor, de nuestro señor Jesucristo, de nuestros líderes criollos mestizos que han luchado por la liberación, por la dignidad de nuestros pueblos”.
También afirmó que prefiere “ser llunk’u del presidente Evo, no llunk’u de los traidores, de los vendidos, no del imperio”.