Se abre polémica por actuación del MAS en litigio por el Silala
La Canciller lamenta el rol del anterior gobierno y hay molestia en Potosí
Tras la polémica desatada por la revelación de que el gobierno del MAS reconoció que parte del Silala es un río "internacional" y "fluye naturalmente" hacia ese país austral, el nuevo agente boliviano ante La Haya, Jaime Aparicio, fue enfático ayer al señalar que la discusión que queda en el litigio debe basarse en el criterio de que "Bolivia no tiene la soberanía sobre el 100% de esas aguas" y que hay canales artificiales.
“Una parte de las aguas del Silala son compartidas, hay un flujo natural que va de Bolivia a Chile, esa es la situación que nosotros hemos recibido. Para aclararle a los bolivianos y para trabajar con la verdad en este caso, debemos decir que lo que está en discusión ya no es si estas aguas son compartidas, lo que está en discusión son otros temas a partir de ahora, como los canales artificiales, el curso artificial del agua, los bofedales, temas de medio ambiente, temas de cómo Bolivia puede usar su parte de agua", aseveró ayer el embajador Aparicio a Unitel.
El diplomático recordó que la demanda chilena por el Silala surgió a partir de las provocaciones de Morales, la cual tuvo que afrontar sin preparación científica ni técnica. "Lo que ya no está en discusión es que son aguas compartidas, es decir que Bolvia no tiene la soberanía sobre el 100% de esas aguas", señaló.
CHILE FESTEJA
El Gobierno de Chile recibió ayer como una "muy buena noticia" que el Ejecutivo del expresidente Morales haya reconocido que el Silala es un río "internacional" y "fluye naturalmente".
El asunto desató polémica en Bolivia. El Gobierno de Áñez criticó el manejo del litigio que hizo la administración de Morales, mientras que este partido calificó de prochilena la actuación del actual Gobierno.
La Cancillería boliviana aseguró la noche del jueves en un comunicado que el gobierno de Morales admitió en la Corte Internacional de Justicia (CIJ), en La Haya, "que una parte de las aguas del Silala fluyen de manera natural hacia Chile".
"Esto significa que no existe materia controvertida en este punto central de la demanda (...) Para Chile es una muy buena noticia", reaccionó el canciller chileno, Teodoro Ribera, en un declaración en sus redes sociales.
La noticia caldeó el ambiente en Bolivia a menos de tres meses de las nuevas elecciones generales. El MAS acusó al Ejecutivo de Áñez de ser "prochileno" y de hacer un uso electoralista de una cuestión que se considera asunto de Estado en el país.
El MAS busca la reelección con el exministro Luis Arce como candidato presidencial, en tanto que Áñez busca dar continuidad a su gobierno transitorio, bajo la alianza Juntos.
Ayer, desde Holanda, la canciller boliviana Karen Longaric, confirmó que el anterior gobierno admitió que una parte de las aguas del Silala fluyen de manera natural y cuestionó al entonces agente ante la CIJ, Eduardo Rodríguez Veltzé, por no haber resuelto en su debido tiempo el litigio con Chile.
Rodríguez dijo hace poco que el proceso estaría prácticamente concluido y que en su impresión personal, la demanda era innecesaria. El abogado sugirió que sea el gobierno de Áñez quien convoque a las autoridades nacionales a un entendimiento "cabal de lo que representa la demanda de Chile".
"Eduardo Rodríguez ha sostenido que este tipo de divergencias, no deberían llevarse a proceso judicial y que deberían negociarse ¿Por qué no lo hicieron a tiempo?", cuestionó la Canciller.
Longaric viajó a la sede de la CIJ, se reunió con el equipo de abogados que contrató el anterior gobierno y presentó al nuevo agente ante La Haya, el embajador Aparicio.
En Twitter, Rodríguez Veltzé resaltó la importancia de abrir información sobre el tema de las aguas del Silala y llamó a las autoridades a no usarlo como un tema político.
El diputado potosino Gonzalo Barrientos (UD) aunció que la comisión de relaciones internacionales de la Cámara de Diputados convocará al exagente ante La Haya y a representantes de la Cancillería para que brinden un informe pormenorizado.
"No puede ser que a través de un Twitter esté tratando de lavarse las manos", señaló.
En filas del MAS, el diputado Víctor Borda criticó el accionar de la Cancillería y anunció una interpelación a Longaric, a quien acusó de emitir declaraciones "prochilenas".
"Los responsables son los que alentaron este proceso y se opusieron a negociaciones previas e incentivaron a que Chile demande a Bolivia, había mucha gente alrededor del expresidente Evo Morales que dio lugar a esta situación", dijo Longaric.
TRAICIÓN
"Si el Gobierno de Evo Morales ha incurrido en aquello, (entonces) incurre pues en lo que establece la Constitución, en el articulo 124 numeral 2, de traición a la patria por violación al régimen constitucional de recursos naturales", señaló el abogado Eduardo León al detallar que las aguas del Silala son recursos no renovables que están protegidos por la CPE, por lo que no es sujeto de negociación ni de transacción.
Desde el Comité Cívico Potosinista (Comcipo) también se criticó la postura de Morales y no descartaron el inicio de procesos. Descartaron que exista información técnica de que la corriente del Silala fluye artificialmente a Chile.
Antecedentes
Chile demandó a Bolivia en 2016 para evitar que impidiera el flujo de las aguas hacia su territorio, al argumentar que el Silala es un río internacional entre ambos países y que debe ser compartido.
Bolivia contestó en 2018 con tres contrademandas bajo el argumento de que las aguas eran originalmente unos manantiales nacidos en su territorio, pero fueron canalizadas hacia la frontera por una empresa chilena de ferrocarriles en la década de 1920.