Tensión en sede diplomática de México, en La Paz, por 7 asilados del régimen de Evo

La tensión en la residencia de la Embajada de México en La Paz se repuso este domingo, cuando la Policía abandonó la guardia que tenía montada ahí desde diciembre pasado y, según denuncias de vecinos y periodistas en redes sociales, además de despachos de medios de comunicación, siete exautoridades del Gobierno de Evo Morales asiladas ahí pretendieron abandonarla.

Luego de las 17:00, un grupo de 200 uniformados, aparentemente militares o policías, fuertemente armados e incluso con perros, rodearon la residencia, según la agencia ANSA.

Esta misma noche, voceros del colectivo Resistencia denunciaron en BoliviaTV que las exautoridades intentaron salir de la sede, para conseguir un salvoconducto que supuestamente iba a ser emitido por el Gobierno argentino en La Paz con el fin de que abandonen el país.

Anunciaron que repusieron su cerco a la residencia y que no permitirán “que escapen” los exministros del periodo más reciente de Morales en el poder. Resistencia se replegó el pasado martes de la zona La Rinconada, donde se ubica la residencia mexicana, aunque hoy repuso su vigilia.

El exministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana; el exministro de Defensa, Javier Zavaleta; el exministro de Gobierno, Hugo Moldiz; el exministro de Justicia, Héctor Arce; la exministra de Culturas, Wilma Alanoca Mamani; el exgobernador de Oruro, Víctor Hugo Vásquez, y el ex Director de Agencia de Tecnologías de Información, Nicolás Laguna, están en la sede diplomática y esperan salvoconductos para dejar el país, aunque el Gobierno se niega a emitírselos bajo el argumento de que deben responder ante la justicia por diferentes denuncias.

Según Prensa Latina, el encargado de Negocios de la Embajada de México, Edmundo Font, encaró este domingo “a los intrusos desde la sede y los increpó advirtiendo que lo que pretendían era una ilegalidad atentado contra territorio mexicano con inmunidad absoluta según la Convención de Viena”.

De acuerdo con la misma fuente, tras aproximadamente 40 minutos de tensión y ante la “decidida actitud del funcionario mexicano, los policías recibieron órdenes de retirarse y se fueron”.

Otras fuentes indicaron que el encargado de Negocios protestó telefónicamente ante autoridades del gobierno de Jeanine Áñez y exigió el retiro del asedio al inmueble, que es custodiado por una veintena de agentes.

Prensa Latina agrega que “la provocación, como la calificaron los informantes, fue precedida por rumores policiales de una inminente intervención de la unidad de élite Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) para allanar la residencia diplomática y detener a los siete exfuncionarios allí asilados”.