Transportistas de Santa Cruz y Cochabamba se desmarcan del paro
A través de un instructivo emitido este lunes, la Federación de Transportistas de Santa Cruz anunció que no acatará el paro de este martes y miércoles

La convocatoria a un paro de 48 horas de la Confederación Nacional de Choferes no halla eco en Santa Cruz y Cochabamba. Los transportistas de estos departamentos decidieron no participar de la medida de presión en demanda de un nuevo diferimiento del pago de créditos, pese al periodo de gracia acordado por el Gobierno con parte de su dirigencia nacional.
A través de un instructivo emitido este lunes, la Federación de Transportistas de Santa Cruz anunció que no acatará el paro de este martes y miércoles, debido a que no existen las condiciones para frenar sus labores y ante el inminente anuncio de una cuarentena en el departamento oriental.
"Santa Cruz no está en condiciones de cumplir, por motivos que la pandemia covid-19 está muy alta y las autoridades del COED (Comité de Operaciones de Emergencia Departamental) están a punto de aplicar cuarentena rígida", indica un instructivo citado por Unitel.
En Cochabamba, el secretario de conflictos de la Federación del Transporte, Ramiro Astulla, informó que no acatarán el paro y pedirán a la Confederación que declare un cuarto intermedio.
“Todos los sectores me han hecho conocer la necesidad de trabajar, ya todos los domingos nos están restringiendo (la circulación) por el rebrote del covid y lo que han dicho es que se hagan las gestiones ante la confederación para que se pueda entablar el cuarto intermedio con el Ministro de Economía; entonces el día martes y miércoles no va haber paro ni bloqueos”, señaló el dirigente en una entrevista con Los Tiempos.
En el resto departamentos, así como en Chuquisaca, los transportistas acatarán el paro.
En el caso de Tarija, un ampliado departamental determinó cumplir el paro de 48 horas, pero sin bloqueos; mientras que en Potosí, los transportistas también acatarán la medida de presión con el corte de calles y carreteras.
Los choferes movilizados reclaman un nuevo diferimiento del pago de créditos por seis meses, pese a que una parte de la dirigencia nacional aceptó el periodo de gracia por el mismo tiempo, anunciado por el Gobierno.