“Vamos a acabar con el ‘Estado-tranca’, 50% de recursos se van a ir a las regiones”
“La gente va a votar contra el MAS, siempre y cuando le propongamos un proyecto nacional con visión de nación”
El senador por Tarija Rodrigo Paz Pereira (57 años), líder de “Primero la Gente”, confirma su candidatura para las elecciones generales del 17 de agosto y desgrana su propuesta electoral en la siguiente entrevista con CORREO DEL SUR. Promete acabar con lo que él llama “Estado-tranca” y entregarles el 50% de los recursos del Estado a las regiones. Además de enfocarse en la economía, centra su propuesta en la reforma de la justicia y dice que los electores le darán una oportunidad a la oposición solo si presenta una alternativa nacional con visión de nación, y espera que su proyecto consiga unificar ese voto.
CORREO DEL SUR (CS). ¿Ud. va a aparecer en la papeleta electoral en agosto? ¿Ya tiene sigla?
Rodrigo Paz Pereira (RPP). Dios mediante, sí. Estamos con un acuerdo que lo haremos público más adelante. Pero, Dios mediante, sí, más que estar en la papeleta, estaremos con un proyecto alternativo para el país.
CS. Bolivia atraviesa por una coyuntura económica compleja. ¿Cuál es su diagnóstico sobre las causas de esta crisis y cuáles los pilares de su propuesta para para reactivar la economía y generar crecimiento sostenible?
RPP. A ver, yo creo que es fin de ciclo de un “Estado-tranca” y de una “economía-tranca”. La demostración del “Estado-tranca” son los pésimos servicios que tenemos por parte del Estado en salud, educación y seguridad ciudadana (…), además de un Estado que absorbe toda la moneda nacional y las divisas extranjeras para su mantenimiento. El año pasado fueron 140.000 millones de bolivianos para mantener al Estado central y 4.200 millones de dólares para mantener las empresas deficitarias.
Acabar con el “Estado-tranca” significa, el 8 de noviembre, tras ser (investido) presidente, el 9 de noviembre emitir un decreto ley donde se rompa el 50-50. O sea, 50% de los recursos del Estado se van a ir a las regiones. Y el impacto de ello, para reactivar la economía, va a ser, uno, facilitar créditos para la gente, liberando de ciertas normativas; o sea, créditos de fácil acceso. Dos, baja de impuestos por debajo del 10% y baja de aranceles por debajo del 10%. Esos tres conceptos, más la ruptura del Estado central, redistribuyendo los recursos a las regiones, (supondrá) reactivar la economía. No soy de aquellos que van a ir a pedir 12 o 5 o 4.500 millones de dólares al Fondo Monetario Internacional. Creo que primero hay que ordenar la casa, hay que cortar el déficit fiscal, estas empresas estatales que son de un partido político, que se chupan ese 50%, que son 70.000 millones de bolivianos, que mandaremos, reitero, a las regiones. Y haremos auditorías a las empresas, para que aquellas que sí son rentables, con recursos propios, prosigan. Y las que no, serán público-mixtas o, a su vez, podrán ser privadas, pero solo privadas con capital nacional. No serán empresas privadas de capital externo, solo para (los) nacionales.
CS. ¿Y qué medidas implementaría su gobierno para abordar la escasez de divisas, la inflación, estos problemas que están preocupando a la gente?
RPP. A través de las medidas que te acabo de mencionar, reactivas economía; o sea, empiezan a fluir los recursos (…). El 85% de la economía es informal. La gente tiene el problema de los impuestos, los aranceles y la falta de créditos. Por eso vas a facilitar crédito, vas a bajar impuestos, vas a bajar aranceles. A partir de ello, vas a generar (flujo), con la inyección de esos 70.000 millones de bolivianos a las regiones. Si no se roba, alcanza la plata. Hay que ordenar (la casa) y establecer un modelo nuevo de manejo de la bonanza. Con esa reinyección de economía a las regiones, vas a reactivar al boliviano y, con el recorte del Banco Central (al Gobierno) –le entregó un valor de 4.200 millones de dólares el año pasado, las divisas son del Banco Central, son de los bolivianos, no son del Estado–, vas a generar divisas, recortando lo que se ha gastado el año pasado, esos 4.200 millones, y vas a empezar con una base de 1.500 a 2.000 millones. Después, está claro que hay políticas que hay que establecer en el tema de la Ley de Minería, la Ley de Hidrocarburos y la Ley de Inversiones en Bolivia.
Bolivia tiene cerca de 7.000 millones de dólares, de (ciudadanos) bolivianos, fuera del país, y tienes que generar una política clara de sinceramiento de la economía para repatriar, por lo menos, entre 3.000 a 3.500 millones de dólares. Eso se va a lograr desde el primer día, el 8 de noviembre. Si soy presidente, el 9 de noviembre estoy generando el decreto-ley para todas estas medidas: romper el 50-50 del Estado central y mandar la platita a las regiones; reactivar (la economía), mediante estas normas que acabo de señalar, y establecer políticas crediticias, arancelarias e impositivas, tres factores fundamentales para reactivar la economía nacional y atraer también las divisas, no solo reactivar a los bolivianos y la moneda nacional.
CS. A propósito, ¿qué rol jugará el sector privado en su plan de reactivación económica, la inversión extranjera y en qué sectores estratégicos?
RPP. Cuando menciono que voy a liberar créditos, bajar impuestos y bajar aranceles, quiere decir que eso está supeditado a los 70.000 millones de bolivianos que mandaré a las regiones, que son para el sector emprendedor de todo rubro. Hay que entender que ahí están cuentapropistas, gremiales, comerciantes, transportistas, emprendedores, profesionales, empresarios. Todo el paquete de la economía nacional será para ellos, porque vamos a acabar con el “Estado-tranca”, para que sea un Estado de servicios, un Estado de respaldo, un Estado de flexibilización, de generación de oportunidades, no un Estado como centro de la economía. La ciudadanía, el sector privado, tanto formal e informal, serán los motores de la economía nacional. Y algo muy puntual: la palabra “asincerar” significa ‘aperturar’, más allá de la procedencia de tus recursos, la economía formal e informal, “asincerarlos” para darles las garantías de que usen el sistema financiero, para fortalecer el sistema financiero y, a través del sistema financiero, se vayan legalizando los recursos y el comercio que generen o los negocios que generen. Por eso te voy a cobrar bajos impuestos, para que tengas fortaleza de reinversión de tus recursos y bajos aranceles, para que la Aduana, a futuro, sea un espacio para protección de la industria nacional. Todo aquello que no se produce en Bolivia, no tiene por qué pagar impuestos. Tiene que fluir para potenciar la economía nacional, entiéndase, tecnología, servicios, conocimiento y otros rubros.
CS. El tema de la administración de justicia es otra de las preocupaciones de la gente. ¿Qué propone para resolver este este problema?
RPP. A ver, creo yo que los mejores hombres y mujeres tienen que ser parte de las grandes reformas del Estado, de las instituciones del Estado; entre ellas, principalmente, la de la justicia. Sin buena justicia, no tienes buena democracia. Sin buena justicia, no tienes seguridad ciudadana. Sin buena justicia, no tienes inversión nacional ni extranjera. Sin buena justicia, no funciona una sociedad. Entonces, los mejores hombres y mujeres, para la reforma de las instituciones, entre ellas, principalmente, la justicia. Segundo, los mejores hombres y mujeres para la reforma y el cambio de la economía. Eso es fundamental. Y tercero, los mejores hombres y mujeres para que, desde el ejercicio de la política de los consensos, podamos llegar a los acuerdos nacionales que vamos a requerir tanto para las (reforma de las) instituciones como para (transformar) la economía. Entonces, hay tres grandes áreas (en las que planteamos trabajar): las grandes reformas de la institucionalidad del Estado, las grandes reformas de la economía y la política, como un espacio de consenso y acuerdos, para lograr, justamente, que estos dos primeros espacios puedan fluir. Sin una política de consensos y acuerdos nacionales, no vas a poder reformar la economía y las instituciones del Estado.
CS. ¿Cómo se define ideológicamente? ¿Es de izquierda, de derecha, de centro, de alguna otra opción?
RPP. He visto que hay la izquierda que roba y he visto que hay la derecha que roba. Si no robaran, en Bolivia alcanzarían los recursos para reordenarlos, bajo las reformas institucionales y de la economía. Entonces, la definición de izquierda o derecha... en principio, no me parece una necesidad definir (si soy de izquierda o de derecha). Creo que lo fundamental es entender y poner a los mejores hombres y mujeres para las reformas de las instituciones y la economía, y la utilidad de Rodrigo Paz, junto a otros, desde la presidencia, va a ser ayudar a estos hombres y mujeres, que nos permitirán las reformas institucionales y de la economía.
¿Cuál es su análisis sobre lo ocurrido con el Bloque de Unidad?
Un proyecto nacional nace desde las bases sociales. Nosotros venimos haciendo un ejercicio de generar alianzas. En estos últimos siete días, hemos hecho alianza con el transporte urbano de Oruro, con los mercados populares de Oruro, con el sector fabril, con las organizaciones territoriales de las 20 provincias de La Paz… Entonces, yo creo que esta lógica, de abajo hacia arriba, con la gente y sus organizaciones, es lo que establece (un proyecto nacional). Y esto es fundamental: un proyecto de base ancha. Lo que creo que ha ocurrido (con el Bloque de Unidad) es que quisieron encarcelar la unidad entre dos actores políticos que, claramente, ni en la suma de las encuestas que dicen tener, suman o dan un total que pueda generar el apoyo mayoritario de la gente. Entiendo que no tienen una base social (…).
CS. ¿Se ve usted cerrando algún acuerdo con alguno de estos líderes del Bloque de Unidad, ya sea con Samuel, Tuto o con algún otro de opositor?
RPP. No, en estos momentos, porque la determinación que tenemos, como organización “Primero la Gente”, es sumar sectores y organizaciones sociales. Ellos tomaron el camino de generar alianzas con los de arriba. Nosotros estamos generando alianza con los de abajo.
CS. ¿Y cuál sería la mejor forma de lograr que el MAS no gane en agosto?
RPP. Yo creo en un proyecto nacional. Significa generar una alternativa válida para el pueblo. Las encuesta serias, no públicas, dicen que el 60-65% de la población quiere un proyecto de renovación, quiere un proyecto de cambio y renovación. Eso está confirmadísimo; o sea que hay una suerte de candidato ausente. Y esperamos, con fe en Dios, fe en el pueblo –ahora no sabemos qué partidos van a correr, no sabemos qué candidatos, el 17 de mayo vamos a saber quiénes serán los verdaderos candidatos–, presentar todas nuestras alianzas y todas nuestras propuestas para que el 17 de agosto la gente defina cuál es el verdadero proyecto de unidad. La gente va a votar en contra del MAS, la gente va a dar una oportunidad a la oposición, siempre y cuando le propongamos un proyecto nacional, más allá de las candidaturas, que hable de una alternativa real, de visión de nación, de la economía y del Estado a futuro.
CS. Un mensaje al electorado boliviano como precandidato.
RPP. Que vienen tiempos mejores. El Bloque de Unidad jamás expresó la verdadera la necesidad de la gente. El Bloque de Unidad estaba en sus peleas internas, caprichos internos, divisiones internas, y el pueblo estaba sufriendo por las largas filas, por el diésel, la gasolina. El pueblo sufre la subida de la canasta familiar (…). Mediante Dios y el pueblo, el 17 de agosto, vamos a generar, a través de un proyecto nacional, el voto de unidad, el cambio y el la culminación de 20 años de desgracia. Cierro con esta cifra: el MAS, su gobierno, se gastó $us 60.000 millones del gas. Nos está dejando una deuda de $us 40.000 millones, de deuda interna y externa, y dilapidó $us 14.000 millones del Banco Central. Son $us 114.000 millones que han desaparecido del país. Son suficientes razones para que se vayan. Eso es haber robado a la patria.