Evo Morales: “YPFB se ha convertido en botín político, urge una reingeniería profunda”
Sus declaraciones se dan en medio de una creciente polémica sobre la situación de YPFB, luego de que el exministro de Justicia Iván Lima denunciara una supuesta sobredimensión del personal y la burocracia dentro de la estatal
El expresidente Evo Morales lanzó este lunes una crítica al actual manejo de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), asegurando que la estatal dejó de ser una herramienta de desarrollo nacional para convertirse en un “botín político” marcado por la corrupción, la burocracia y las prebendas.
“Cuando recuperamos YPFB, lo hicimos con dignidad y conciencia histórica”, recordó Morales, aludiendo al proceso de nacionalización de los hidrocarburos impulsado durante su primer mandato en 2006. Según el líder cocalero, la estatal petrolera fue clave para garantizar la estabilidad económica del país y la redistribución de la riqueza.
Sin embargo, lamentó que se haya desvirtuado el rol estratégico de la empresa. “Con tristeza, vemos cómo la han convertido en botín político, llena de prebendas, corrupción y burocracia. No basta con denunciar. Urge una reingeniería profunda”, expresó en una declaración difundida a través de sus redes sociales.
Cuando recuperamos YPFB, lo hicimos con dignidad y conciencia histórica. El neoliberalismo la había entregado al capital extranjero bajo el engaño de la “capitalización”.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) April 22, 2025
Con la nacionalización, YPFB volvió a ser del pueblo. Fue motor de la estabilidad económica, de la… pic.twitter.com/qVdPLJE09O
Morales también hizo un llamado a recuperar el sentido original de las empresas estatales, que —dijo— deben estar al servicio del pueblo y no de los intereses del poder de turno. “Deben volver a ser herramientas del Estado para generar riqueza y bienestar para todos”, enfatizó.
Sus declaraciones se dan en medio de una creciente polémica sobre la situación de YPFB, luego de que el exministro de Justicia Iván Lima denunciara una supuesta sobredimensión del personal y la burocracia dentro de la estatal, incluyendo la existencia de “más de 100 comunicadores sociales”. La empresa negó estas cifras y aseguró que cuenta con solo 2.700 trabajadores y 22 comunicadores.
El pronunciamiento de Morales también coincide con un momento clave en el calendario político, cuando el debate sobre el futuro del sector energético comienza a ocupar un lugar central en la agenda de cara a las elecciones del 17 de agosto.